Tener ecosistemas artificiales en casa, diseñados con hermosas plantas, proveen un ambiente saludable, que transmite relajación. El ecosistema artificial produce mayor cantidad de oxígeno, lo que contribuye a mejorar la calidad del aire.
Ecosistemas naturales y Ecosistemas artificiales
Según su origen, existen ecosistemas naturales y ecosistemas artificiales o humanizados.
Ecosistema natural
Un ecosistema natural, es aquel que se encuentra en un medio netamente de origen natural, formado por grupos de seres vivos que se relacionan entre sí. De tal modo que, está formado por las islas, ríos, mares, continentes, y los seres vivos que allí interactúan, que pueden ser microorganismos, plantas, animales vertebrados, etc.
Ecosistema natural modificado
Es aquel ecosistema natural que ha sido modificado, directa o indirectamente, por la acción del ser humano. De cierto modo puede considerarse también, una forma de ecosistema artificial.
Ecosistemas artificiales
Los ecosistemas artificiales también llamados ecosistemas humanizados son hechos por la mano del hombre, quien conscientemente controla las condiciones de dicho ecosistema.
En los ecosistemas artificiales el ser humano controla total o parcialmente las condiciones del ambiente. De tal modo que dichas condiciones abarquen variedad de organismos vegetales y de organismos animales. Además, podrá abarcar el tipo de suelo y la participación de la lluvia, también del agua, de igual forma cualquier cambio de temperatura o de la atmósfera. El ecosistema artificial copia un ambiente natural en un espacio que no lo es.
En un ecosistema artificial, los seres vivos no sólo se encuentran interrelacionados a través de procesos vitales sino que a su vez, se relacionan en este ambiente con elementos no vitales del ecosistema.
7 beneficios psicológicos de tener ecosistemas artificiales en casa
Hoy en día se ha creado la necesidad de tener ecosistemas artificiales debido al cambio climático y al calentamiento global. De tal modo que, la persona pueda vivir en un ambiente más sano. Entre los beneficios psicológicos que conlleva tener un ecosistema artificial en casa están:
1.- Alivio de las tensiones emocionales
El cuidado del ecosistema en el hogar, ayuda a relajar a la persona, a mejorar el estrés, la ansiedad o la depresión.
2.- Sensación de compañía
Los ecosistemas artificiales hacen compañía. A pesar de que muchos piensan que estos son sólo un gesto de tipo decorativo, sucede sin embargo, que son seres vivos que llegan a acompañar a las personas por años y ayudan a evocar recuerdos. De manera que, se vuelven parte importante de la vida diaria de la persona que en ello haya puesto su dedicación.
3.- Mejoran el ánimo.
Pasar el rato en los ecosistemas adecuados dentro de casa, o dedicarse a su cuidado, mejora el ánimo. Al producir aumento de endorfinas, quienes son las encargadas de generar sensaciones de felicidad. Por lo que, los ecosistemas artificiales mejoran positivamente el estado anímico de las personas que los sostienen.
4.- Permiten la desconexión total.
Los ecosistemas artificiales permiten que la persona se desconecte totalmente, ya que, desvía la atención hacia el mantenimiento de este. De tal forma que, la mente se olvida momentáneamente de situaciones difíciles que están afectando a la persona.
5.- Mejora la autoestima
Sentirse satisfecho por los resultados obtenidos gracias a la dedicación en el cuidado diario y atención del ecosistema, favorece positivamente el autoestima. De tal modo que, ver como salen las hermosas flores de un ejemplar en particular, por citar una acción, produce una gran satisfacción personal.
6.- Contribuyen a la socialización
Favorece la socialización, al compartir con otros la afición que se tiene hacia el ecosistema artificial y sus plantas, bien sea compartiendo consejos o aprendizajes. Del mismo modo se socializa al intercambiar semillas o ideas con otros, por mencionar más ejemplos.
7.- Se adquieren responsabilidades y permiten la organización
Al tener un ecosistema artificial la persona adquiere responsabilidad en los cuidados que este amerite. Asimismo, tener un ecosistema artificial ayuda a organizar la agenda diaria para mantener los cuidados, el orden y dar prioridad de acuerdo a las necesidades requeridas.
Los ecosistemas artificiales aumentan el amor al hogar.
Al dedicar tiempo a los ecosistemas artificiales para arreglarlos y mantenerlos hermosos, se crea la motivación para sentirse a gusto en casa. De tal modo que se disfruta en el hogar de un ambiente plácido, agradable y muy bonito.
¡Ya lo sabes! Los ecosistemas artificiales en casa transmitirán una sensación agradable para quienes habiten en sintonía con ellos. Sensación que se manifiesta a través de la tranquilidad. Asimismo, estos ecosistemas aportan otras improntas positivas que incluyen el confort y a su vez el amor hacia el hogar.