WADI RUM Día 4. - Wadi Rum es un desierto y por lo tanto posee todo aquello que se espera de él. Deberás tener especial cuidado al sol (llevar sombrero que cubra el cuello) y el calor en verano y al frio en invierno. Es un lugar muy duro y solo los beduinos viven allí de manera permanente en pequeños campamentos con sus rebaños de cabras o camellos, éstos últimos para realizar las actividades con los turistas. Es un mundo diferente, cambiante e impactante que no os podéis perder.
El acceso a la zona protegida del desierto de Wadi Rum está controlada desde el centro de visitantes y todos los vehículos, animales, guías o turistas deben estar organizados o aprobados allí. Wadi Rum es patrimonio de la humanidad nombrado por la UNESCO. Desde allí parten recorridos en 4x4 que visitan algunos de los puntos de interés. Nada más llegar te das cuenta de que estas en uno de los entornos naturales más espectaculares de Oriente Próximo.
Durante todo el día, en varias excursiones en vehículo todo terreno 4x4 se visitan los lugares más bellos del desierto rojo. Cañones de paredes rocosas de múltiples formas entre jebels (montañas), impresionantes Rock Bridges o puentes naturales moldeados por la erosión durante 50 millones de años, campamentos beduinos como el de Siq Um Al Tawaqi y al atardecer la parada obligada para ver la puesta de sol y el cambio de colores del desierto en el Valle de la Luna.
Se puede hacer senderismo en el desierto, pero nosotros estuvimos un día completo y con el tiempo justo la opción ideal era el todo terreno para poder ver alguno de los puntos de mayor interés. Visitamos las Dunas de arenisca roja como las de Al Hasany, subir a ellas no es nada fácil, la fina arena multiplica por tres el esfuerzo y la distancia, Los Siete Pilares de la Sabiduría, llamados así en honor al libro de Lawrence de Arabia. Inscripciones talmúdicas y nabateas en Alameleh, donde también se puede dar un paseo en camello. Canalizaciones en las paredes de roca hasta pequeños pozos donde recoger el agua para ovejas, cabras y camellos beduinos.
En nuestro viaje pasamos una noche en el campamento "Sun City" y resultó ser un lugar encantador y bien preparado a todos los niveles. Nada más llegar pudimos ver el resultado de la típica cocina Jordana con un cordero, un pollo y el arroz para la cena de esa noche después de cocinarlo bajo la arena del desierto. El comedor es una cúpula acondicionada de lujo, climatizada y con vistas al desierto, que Merche y yo tuvimos la suerte de compartir con dos viajeros madrileños. Al llegar la noche podréis tumbaros en la arena y contemplar un número infinito de estrellas en un cielo maravilloso y después ver amanecer en este insólito y bellísimo lugar.
Lo más llamativo sin duda es recorrer el desierto, caminar por sus dunas y sobre sus rocas. Un día completo en el desierto de Wadi Rum, formado por una serie de valles que ofrecen un paisaje insólito de arena y rocas, de arenisca, granito y basalto, visitar un campamento beduino entre las montañas y observar las estrellas que en otro tiempo guiaron a las caravanas son toda una oferta que no se puede menospreciar. Merece mucho la pena, tanto, que te surgirán dudas sobre cual ha sido la visita estrella del viaje, "La ciudad de Petra" o el "Desierto rojo de Wadi Rum".
Para que os hagáis una mejor idea de como es Wadi Rum, os dejo aquí algunas fotografías más:
Wadi Rum con mi Nikon D850
(en construcción)
MAR MUERTO Dead Sea o Mar muerto es una masa de agua que se encuentra en el lugar más bajo del planeta, a más de 400 metros bajo el nivel del mar y tiene una profundidad de más de 390 metros. Un mar donde es imposible ver un pez, un alga o cualquier otro modo de vida que no sea un turista. Tiene un alto nivel de sales (se pueden ver formaciones en las orillas como si fueran rocas de color blanco) y minerales que poseen muy buenas propiedades terapeúticas, así que es un lugar de visita para muchas personas con problemas de piel o de salud.
El Mar Muerto, tiene 3 millones de años de historia pero cada vez es más pequeño bajando su nivel medio metro por año con la evaporación y la industria como responsables. Está rodeado de montañas y en días claros se ve perfectamente en la orilla contraria a Jordania, las colinas de Jerusalén donde se cree que se construyeron las ciudades bíblicas de Sodoma y Gomorra. Nuestra parada se hace en Ammán Beach II. Un establecimiento turístico con varias piscinas de agua dulce, spa, duchas y sombrillas muy cerca de lo que podemos denominar playa. Baños de barro, alquiler de toallas y un restaurante donde comimos estupendamente (el lunch nos entraba en los servicios contratados con Bidtravel).
Es un lugar abierto donde no existe problema para bañarse en bikini o bañador, aunque veáis a los jordanos nadar vestidos. Cada uno es libre. Aquí olvidamos la parte cultural del viaje para convertir la visita en un momento de diversión absoluto. Es una visita obligada pero corta. Solo ver como cada uno de nosotros intentaba desenvolverse en el agua era un no parar de reír. Una rara sensación de flotar sin esfuerzo que casi hace imposible nadar, porque las piernas se te quedan literalmente fuera del agua. Que no falte la foto leyendo el móvil o el periódico boca arriba, te sobrará la colchoneta. Una buena mañana hasta después de comer que vamos a recordar siempre.
RUTA DE LOS CASTILLOS
Es una de las excursiones recomendadas y opcionales desde Ammán, para conocer las construcciones más representativas entre los siglos VII al XI, ejemplos de caravaserais o refugios para las caravanas, pabellones de descanso o fuertes de carácter militar. Los tres castillos se encuentran en la carretera 40 con dirección a la frontera de Irak y están en diferentes estados de conservación, cada uno de ellos con sus particularidades.
- Qasr Al Kharanah. Solitario, destaca sobre una pequeña loma en una llanura desértica con una estructura cúbica y torres semicirculares en las esquinas que no superan la altura del edificio. Es el más antiguo de los palacios omeyas datada unos 700 dC. Tiene un patio interior y unas sesenta estancias en dos alturas. Las habitaciones del segundo piso eran viviendas. Es ejemplo de techos abovedados y un pórtico arqueado único. Aunque desde el exterior parece una enorme fortaleza, parece que se utilizaba como lugar de conferencias donde los califas se reunían con las tribus y los beduinos locales para resolver sus asuntos.
- Quseir' Amra. Es el de menor tamaño de los tes, pero el más importante para muchos por la decoración de su interior. Fue utilizado como lugar de veraneo y descanso por el califa y sus príncipes. Una de sus construcciones es un sistema termal de influencia romana para dar agua y ambiente a los baños. Tiene un buen número de frescos en buen estado con escenas de caza, frutos y mujeres desnudas o semidesnudas que representa una excepcionalidad en un país árabe. Fue declarado patrimonio de la Humanidad en 1985.
- Qasr Al Azraq. Está situado a las afueras de la ciudad del mismo nombre y se le llama también la "Fortaleza azul". Una construcción cuadrada de 80 metros de lado con un patio interior y en el centro su mezquita de época omeya. La puerta es una losa de granito muy pesada pero que aún funciona, aunque haciendo un buen uso de la fuerza y bien lubricadas sus bisagras con aceite de palma. Aquí estableció su cuartel general Lawrance de Arabia para luchar contra los otomanos. El lugar es estratégico en el oasis de Azraq, única fuente de agua en 12.000 km cuadrados de desierto.
El trayecto es lineal, así que después de visitar el más lejano de los castillos donde Lawrence de Arabia pasó el invierno de 1918 durante la Rebelión Árabe contra los turcos y pisar donde el explorador lo hizo en esos días, toca volver a Ammán por la misma carretera.
AMMÁN Se la conoce también como la Ciudad Blanca. Ammán en un principio se creó sobre siete colinas o jebels y en la actualidad se ha extendido por más de diecinueve colinas. La panorámica de la ciudad es inconfundible desde cualquier altura con sus edificios y casas de piedra clara, todas cuadradas. Una ley obliga a que todos los edificios sean de estas tonalidades para que la arquitectura urbana se vea homogénea. Solo en la parte moderna de la ciudad se pueden ver rascacielos, boutiques, centros comerciales y un buen número de hoteles de distintas construcciones.
No es una ciudad antigua, pero si es una de las ciudades más acogedoras de Oriente Próximo y acoge un buen número de lugares para la visita encabezados por la magistral "Ciudadela" y después descender a las espectaculares ruinas del Teatro Romano, el museo, las mezquitas y los zocos. Nuestra visita se dividió en varios días, el primero a nuestra llegada y el segundo el día antes de partir de vuelta a España. Teníamos contratada la visita panorámica de Ammán y no nos defraudó.
Es una ciudad muy segura, de lo que se enorgullecen los jordanos y de fácil acceso en taxi, aunque una vez en el centro la mejor manera de recorrer Ammán es a pie ya que el tráfico es caótico. En el centro hay lugares para el cambio de moneda y se nota que es una ciudad abierta en detalles como los enormes "Grafitis" en las paredes de sus edificios con motivos reivindicativos, los cafés y restaurantes y las calles donde se mezclan los zocos, con las tiendas modernas como en cualquier ciudad europea.
Comenzamos realizando la visita panorámica de Ammán, subiremos a la Ciudadela que está en la colina más alta Jebel al-Qala’a, donde vemos la antigua Rabat-Ammon rodeada por una enorme muralla. Los lugares más llamativos son el "Templo de Hércules", el "Palacio Omeya", el "Museo Arqueológico" y el "Edificio de la Sala de Audiencias", construido sobre la base de una iglesia bizantina (por cierto, su cúpula fue reconstruida por arquitectos españoles).Antes de bajar de la colina, disfrutamos de las vistas de la ciudad de Ammán donde llama la atención el "Asta de Raghadán", un mástil con la bandera de Jordania con una altura de 126,8 metros que se colocó el año 2001 para conmemorar el día de la independencia de Jordania en los terrenos del Palacio Real de Raghadán. La tela mide 60 metros de largo por 30 de ancho y es visible desde todos los lugares de Ammán.
Por la mañana volamos de vuelta a Madrid.
FIN DEL VIAJE.
Si quieres ver el mapa con el itinerario completo, la ruta y los lugares de visita más importantes por donde hemos pasado, pincha en el icono. Te harás una buena idea del recorrido en este viaje de 7 días en Jordania.