Querida nueva Mamá, hoy me gustaría darte algunos consejos para evitarte los errores que cometió una servidora a la hora de comprar muebles para bebés. El síndrome del nido y el perfeccionismo característico de las embarazadas provocan que la fecha estimada de parto sea el tope que se marcan estas mujeres en estado de buena esperanza para tenerlo todo, absolutamente todo, preparado.
Espero poderte echar un cable con estos consejos antes de que llegue el gran día.
Armario grande
Yo me equivoqué y compre un armario muy mono, pero diminuto. Ha sido una de las perores compras que he realizado en mi vida por 3 razones. La primera es que la diminutez de los bebés desaparece a la velocidad de la luz y la del armario permanece. La segunda es que la cantidad ingente de ropa que necesitan no es apta para armarios del tipo Pin y Pon. Y la tercera es que si eres de las que con sólo pestañear te vuelves a quedar embarazada, tal y como me sucedió a mí, llegará un momento que no sabrás en qué lugar de la casa almacenar la ropa. Dentro de las posibilidades y del espacio que dispongas, compra lo más grande que encuentres.
Estanterías altas (con enchufes también altos)
Sé que lo de los enchufes altos son palabras mayores porque requiere hacer regatas, pero en cuanto tu hijo ande y se obsesione por ellos, pregúntate dónde enchufarás la luz quita miedos, el humidificador y el antimosquitos por ultrasonidos. Si por lo que sea viene un electricista a tu casa para alguna otra, no deje de planteárselo.
En cuanto a las estanterías altas, las aconsejo por la misma razón. El humidificador es un gran invento para que los niños respiren mejor pero no puede estar a su alcance. Lo miso sucede con otros peligros, por ejemplo los medicamentos. Planifícalo desde el principio porque cuando pilles a tu hijo de 14 meses mordiendo un cable, te va a dar mucha pereza taladrar la pared para moverlo todo hacia donde él no llegue.
Butaca o silla confortable
La silla que tenemos en la habitación de los niños es un elemento indispensable. Si te decides a adquirir una, te animo a que des un paso más allá y te decantes por una butaca. Al principio la puedes poner en tu habitación y luego trasladarla a la habitación del retoño. La necesitarás para amamantar o darle los biberones nocturnos a tu hijo, para las noches en que esté acatarrado, porque tendido no podrá dormir (por los mocos) y respirará mejor semi-recostado sobre ti y tapadito con una manta. También la usarás para explicarle cuentos justo antes de irse a la cama.
Cambiador
Es un gran invento y es imprescindible para el primer año. Te evitará muchos dolores de espalda y te permitirá tener a mano todo lo necesario, que va a ser mucho. Yo compré uno muy sencillo y me habría venido genial uno con estantes o recovecos varios para tener al alcance pañales, toallitas, pañuelos, cremas diversas, gasas, tijeras, colonia, suero para los ojos, suero para la nariz, supositorios y el ineludible sacamocos.
Cuna convertible en cama
Antes de que naciera nuestra primera hija invertimos en una cuna de Ikea. Vaya por delante que soy una gran admiradora de Ikea, pero en este caso si pudiera volver atrás me decantaría por un conjunto de cuna convertible en cama. Los meses transcurrirán más rápido de lo que piensas y ya que te gastas el dinero, inviértelo en algo que dure al menos hasta que decidas cambiar la habitación de bebé por una de niño. De esta forma evitarás la sensación de desgana que supone cambiar los muebles una vez los niños ya están en casa.
Cortinas
Procura que no sean cortinas que inviten a columpiarse en ellas. Nosotros actualmente no tenemos ni una sola cortina en toda la casa y desde entonces vivimos más tranquilos.
Baúles para juguetes
Te proporcionarán la manera de tener la habitación recogida en un plis. También te irán de maravilla para enseñar a tu hijo a recoger los juguetes. Más tarde estos baúles se convierten en improvisados asientos-mesa para dibujar y para que el bebé que empieza a andar se apoye.
Y por último: ante la duda, espera
Es mucho más urgente que dejes lista la bolsa para el hospital desde el 7º mes que el hecho de tener la habitación de tu bebé completamente decorada. Por regla general, hasta los 3 o 4 meses los bebés duermen en un moisés junto a la cama de los padres (eso si no duermen con los padres…). Así que, si no tienes claro qué comprar, hazte con el moisés y espera a recibir la inspiración o una asesoramiento adecuado para amueblar la habitación del bebé de forma coherente.
Querida nueva mamá sé que estás inmersa en una vorágine de compras, esta es la razón por la que te he dedicado este post, para que al menos en cuanto a los muebles para bebés se refiere, tengas una referencia y no vayas a ciegas. Pregunta las dudas que se te planteen a través del espacio para comentarios y si está en mi mano, te ayudaré.
Este post ha sido redactado según el Código de Confianza C0C