Hola a todos, se va acercando la época de exámenes y sois muchos los padres que os acercáis a la farmacia, a por “algo” para aumentar la concentración y la memoria, “¡pero natural, de plantas medicinales!”. Y la verdad es que por aquí por el sur de España, con estos calores y después de haberlo “dado todo” durante el curso, ¡parece como que las neuronas, no quieran trabajar, vaya tela!. La verdad es que veo a mis hijos totalmente exhaustos y me miro a mí, que durante todo el año, no he parado de seguir formándome, ¡y ya no me cabe ni una idea más en la cabeza! Uffffff
Bueno pues y hoy vamos a hablar de cómo aumentar el rendimiento intelectual, tanto a nivel memoria, como a nivel de concentración.
Sabemos que el rendimiento intelectual es la capacidad que tenemos las personas para aprender, memorizar y ejercitar la mente; de todo esto se encarga el cerebro. Para aprender y memorizar, el cerebro emplea una serie de sustancias que se llaman neurotransmisores. Y los más importantes son la noradrenalina, la noradrenalina, la acetilcolina y la serotonina.
Además también intervienen en estos procesos de memoria y aprendizaje sustancias tan importantes como el magnesio y las vitaminas del grupo B, ¡un déficit de éstas puede tener consecuencias negativas a la hora de poder concentrarse y aprender! Yo siempre insisto que son fundamentales no sólo para esto, sino también en personas con depresión.
Habría que preguntarse ¿por qué en un momento dado de nuestra vida, nos cuesta más trabajo memorizar o concentrarnos? La verdad es que yo recuerdo cuando estaba en la facultad ¡que era capaz de memorizar sin problema libros enteros y ahora para estudiar 5 folios, me las veo y me las deseo! Pues deciros que para nuestra desgracia esto es normal, se ha visto que a partir de los 50 años una de cada dos personas tendrá un deterioro cognitivo leve, que conforme se va cumpliendo años, esto se va agravando.
Pero supongamos que estamos normales, hay determinadas patologías que pueden hacer que tengamos disminuido el rendimiento intelectual y la memoria, como pueden ser:
- el estrés (¡maldito!) cuando hay un agotamiento físico y mental, ¡¡somos incapaces de aprender!! (por esto suelo recomendar adaptógenos como el Ginseng, la Ashwagandha, la Rodiola…)
- Por falta de sueño, es importantísimo ir descansado a un examen o a una prueba de trabajo, ¡se va a rendir mucho más!
- personas con tratamientos oncológicos
- la depresión produce un deterioro cognitivo grandísimo, aquí suele haber agotamiento de sustancias como el magnesio o vitaminas del grupo B
- el consumo de alcohol, drogas
- en la menopausia las mujeres tenemos la sensación de tener disminuida la memoria
- niños con TDHA (hiperactividad y déficit de atención)
- en personas mayores con alzheimer, parkinson…
En el mundo natural existen plantas medicinales o vitaminas y minerales que pueden ser una opción terapéutica para tratar la disminución de la memoria y la falta de concentración.
Aquí os recomiendo:
– los adaptógenos, ¡¡me encantan, sirven para “casi” todo!! La Rodiola, el Ginseng, el Eleuterococo, la Maca, el Grosellero negro … van a hacer que nuestro cuerpo aumente su resistencia tanto física, como mental frente a situaciones que nos pueden resultar estresantes como puede ser un examen, una enfermedad, un trabajo. Estas plantas restablecen el equilibrio de nuestro organismo, cuando está estresado y lo más gracioso del tema es que sólo actúan cuando en el organismo hay un desequilibrio real.
– el Ginkgo biloba, se sabe que la hoja de Ginkgo aumenta la hipoxia en el cerebro (llegando más oxígeno allí), por tanto va a mejorar el flujo sanguíneo cerebral y la microcirculación. Todo estos se traduce en una mejora en la memoria y un aumento en la capacidad de aprender. También se ha visto que tiene una potente función antioxidante, lo que va a proteger a nuestras neuronas.
– aceite esencial de laurel Laurus nobilis aumenta la concentración. Solo pon unas 2-3 gotas en el interior de las muñecas y realiza inhalaciones profundas (esto se eres asmático, no lo puedes hacer). El aceite esencial de laurel tiene una acción neurotónica, es decir tonifica las facultades mentales, estimula el cerebro y es psicoactivo, por todo esto se usa para potenciar la memoria y el aprendizaje.
– el olivo favorece la circulación cerebral, búscalo en extracto y si es de yemas ¡mejor!
– fosfatidilserina es un componente esencial de las membranas celulares, se sabe que la fosfatidilserina tiene un papel fundamental para mantener la memoria clara. Ya que a medida que vamos cumpliendo años, suele estar disminuida su concentración en casos de depresión.
– ácidos grasos omega 3-6-9 son grasas insaturadas algunos de ellos son esenciales, pues nosotros mismos no las podemos producir, desempeñan un papel importante en la estructura grasa de las membranas, especialmente en la mielina del sistema nervioso.
– magnesio interviene en muchas de las reacciones que se dan en el cerebro, las sinapsis, unas terminaciones nerviosas que van a favorecer el paso de la información por los neurotransmisores (dopamina, noradrenalina… ), y están implicados en la atención, la concentración y la memorización. El magnesio, asociado con otros aminoácidos y vitaminas del grupo B, es fundamental para la formación de los neurotransmisores.
– vitaminas del grupo B ¡es un grupo de vitaminas! las cuales sobre el sistema nervioso lo mantiene “a punto”, estimula nuestra salud mental, fortalece nuestro sistema inmunológico, ayudan también a formar glóbulos rojos, a obtener energía, cuida de nuestro corazón y arterias. Se ha visto que personas con deterioro cognitivo, depresión, tienen niveles de estas vitaminas muy bajitos.
Bueno creo que se a alguien le falla la memoria, ¡no es por falta de información sobre cómo evitar con plantas medicinales y vitaminas que se deteriore!
Piensa en verde, ¡¡pero PIENSA de verdad!! Hasta el próximo día.
Referencias:
Essa, M.M., Vijayan, R.K., Castellano-González, G., Memon, M.A., Braidy, N., Guillemin, G.J. (2012) Neuroprotective effect of natural products against Alzheimer’s disease. Neurochem. Res., 37: 1829-1842.
http://www.ema.europa.eu/docs/en_GB/document_library/Scientific_guideline/2009/09/WC500003647.pdf
mi biblia de los aceites esenciales Daniele Fessty
Mason JB. Vitamins, trace minerals, and other micronutrients. In: Goldman L, Schafer AI, eds. Goldman’s Cecil Medicine. 24th ed. Philadelphia, PA: Elsevier Saunders; 2011:chap 225.