Llaman a Batman Caballero de la noche porque, aunque es protector de los necesitados, defensor de la justicia, dador de luz por el hecho de ser superhéroe, es en realidad la oscuridad (las sombras y temores) su guía.
Se trata del recuerdo de una infancia tortuosa, agravada por la tragedia y anclada en el temor de quedar aislado, en la angustia de sentir que su vida carecía de sentido.
No importa qué actos heroicos realice Batman ni cuántos triunfos logre, su pasado trágico siempre termina entrometiéndose en sus actos. Incluso sus grandes adversarios, como Guasón y Acertijo, reflejan su caos contenido.
Así, sus pesadillas y temores no resueltos cobran vida, pues en estos personajes se advierten las mismas cualidades que pueden convertirse en una peste si son desatendidas.
Él podría convertirse en ellos. Está al filo de la navaja, en constante riesgo. Es tentado por la oscuridad pero rara vez cae en la trampa...