Mi puntuación: 8/10
Revista Cine
Estamos ante la demostración de que es posible hacer cine que despierte toda clase de sentimientos en el espectador sin forzar la introducción de innecesarios giros dramáticos. Esto se consigue mediante una historia cercana y creíble protagonizada por unos actores que desprenden naturalidad y desparpajo en sus respectivos papeles, encabezados por un sorprendente Miguel Herrán que define a la perfección un personaje tan problemático como entrañable. Como la vida misma, la película nos brinda situaciones de drama y comedia, que nos harán reír y nos conmoverán, dejándonos al final con ganas de saber hacía donde les llevará la vida a sus "ficticios" protagonistas.