A-cero presenta un nuevo proyecto de vivienda unifamiliar en Líbano

Hoy el estudio de arquitectura A-cero, dirigido por Joaquín Torres y Rafael Llamazares, presenta un nuevo proyecto de vivienda unifamiliar situado en Líbano. Esta vivienda cuenta con una superficie total de 475 m2 en el interior distribuida en planta baja y planta alta, 114 m2 de espacios exteriores cubiertos y 185 m2 de espacios exteriores abiertos.

CROQUIS

ALZADOS

SECCIONES

PLANTA BAJA

En este nivel encontramos el acceso principal a la vivienda. A través de un porche entraremos en un espacio interior de 282 m2 distribuidos principalmente en zonas de uso común. Encontramos un hall de entrada junto a las escaleras y guardarropa, un aseo de cortesía, un dormitorio de invitados en suite de 17 m2 con cuarto de baño de 6m2 y porche de 18,5 m2, una sala de estar de más de 60 m2 con porche de 17 m2 y pérgola de 20 m2, un comedor de 23 m2 con porche de 22 m2 y cocina de 25 m2.  También en este nivel encontramos la zona de servicio que cuenta con un corredor hacia el cuarto lavadero y el tendedero, un cuarto de servicio de 11 m2 con cuarto de baño de 4 m2, y un hall previo al garaje con capacidad para 2 vehículos.

En el exterior observamos un patio de 58 m2,  los accesos a la vivienda (peatonal, para vehículos y de servicio) y un acceso al parking exterior de 47 m2 con capacidad para dos vehículos.

PLANTA ALTA

En este nivel de 193 m2 encontramos las zonas de uso más privado de la vivienda: tras un hall observamos una sala familiar con cocina de 35 m2, dos dormitorios en suite de 19m2 con cuarto de baño de 6 m2 y un porche compartido de 10 m2, una librería de 10m2 y el dormitorio principal de 32 m2 con cuarto de baño de 15 m2, vestidor de 7 m2 y porche de 5 m2.

PLANTA CUBIERTA

VISTAS EXTERIORES

El diseño de esta vivienda se contempla como un gran juego de volúmenes donde reina la robustez y sobriedad de las líneas rectas.

Se apuesta por un acabado en hormigón armado teñido de gris oscuro, utilizado en otros diseños característicos del estudio y hasta ahora no demasiado empleado en las residencias unifamiliares.

El diseño ortogonal abre un gran prisma donde se ubican amplios ventanales en ambos niveles, grandes paños de vidrio que permiten la entrada de luz natural y conectan el interior de la vivienda con la arquitectura de su entorno.