A España no la conocerá ni la madre que la parió

Efectivamente, ni la madre que la parió va a conocer a estos políticos, retirados en su mayoría, y que cambiaron los ideales por el parné y la posición social más o menos discreta, dentro de un mundo reservado a media docena de privilegiados. El Sr. González, tras presidir durante más de una década este país, se retiró discretamente a un segundo plano, desde el que cambió de pareja, para contraer nuevo matrimonio con Dª Mar García Vaquero, cuñada de D. Pedro Traponte, veinte años más joven que el expresidente y muy bien situada dentro de la alta sociedad madrileña, lo que le permitiría a D. Felipe pasar a formar parte de ella sin necesidad de una estnacia intermedia más o menos larga, dentro de la “beautiful people” que él mismo creó para diferenciarse de esa otra suerte de casta a la que no quería pertenecer sin renunciar a sus privilegios. El otro día salía con el rey emérito de comer… de Zalacaín, restaurante de tal nivel que a muchos españoles les pasará la vida sin que hayan llegado a disfrutar algo parecido, y todo sin perder la compostura ni cambiar la ideología, que ahí es donde reside uno de los principales médicos del progresismo militante. Desde este espacio nuestra enhorabuena al Sr. González por su nueva vida junto a esta hermosa dama y deseamos de corazón mucha felicidad en el día de su septuagésimo tercer cumpleaños y que cumpla muchos más.