Civilización o barbarie
La derecha vuelve a las fuentes, pero con plumas mucho menos diestras (valga la contradicción).
(…) Peor fue el resultado de las concurrencias: mientras la Catedral de la Capital estuvo llena de gente común que no ostentó ninguna identificación partidaria, la de Luján estuvo marcada, otra vez, por la presencia de las delegaciones políticas, trasladadas generalmente por los escépticos barones del conurbano. Dos Argentinas se movían aquí y allá, por todos lados. Populares artistas, aunque mayoritariamente de un color ideológico determinado, actuaron bajo la organización de los actos del gobierno nacional. Otros artistas, menos ideologizados, trabajaron o presenciaron el espectáculo del Colón.
Joaquín Morales Solá, en La Nación