Ayer conocíamos algunos datos del estudio anual de la UNESCO "Educación para todos" y el titular aunque no es nada nuevo, a mí me sigue impactando: "España es el primer país de Europa en términos de fracaso escolar y de mala inserción laboral de sus jóvenes".
Es cierto que dentro de esa generalidad del titular hay muchos jóvenes que consiguen salir "victoriosos" del sistema, jóvenes que logran desarrollarse profesionalmente, jóvenes que serán felices con el futuro laboral que podrán escoger... pero, ¿y qué hacemos con el resto? Pienso en esa frase y en otros datos publicados, como por ejemplo el informe PISA, y no soy capaz de comprender qué estamos haciendo.
No sé qué están haciendo las autoridades gubernamentales, que reforma tras reforma aumentan los índices de fracaso escolar (justamente lo contrario a lo que pregonan como motivo para el cambio); no sé qué están haciendo las personas y entidades relacionadas con la escolarizaciónn para seguir unos métodos (impuestos desde el exterior o no) que como dice el informe "les aboca a desaprovechar su potencial, les hace perder oportunidades de empleo"; no sé qué estamos haciendo los padres que no nos plantamos y decimos: "punto final, no se juega con la educación de nuestros hijos".
Y posiblemente no sé qué estamos haciendo porque soy una simple madre, sin estudios reglados en educación, pero a la que sí le preocupa ésta. Quizás no se trata de buscar culpables (o sí, habida cuenta de que los que sufren estas noticias son niñ@s y jóvenes), sino de qué hacer
desde esa realidad que se nos presenta. Algo falla, está claro, clarísimo. Y algo falla mucho más allá de que puedan encontrar un puesto en el mercado laboral cuando acaben su educación.
Hace unos pocos años miraría este titular y soñaría con la utopía de poder cambiarlo, de ser capaz de dar un giro a esta situación, de poder modificar el sistema educativo (qué bonita es la inocencia...). Ahora sé que no, que no puedo, que no está en mis manos el dar un giro total al sistema. Pero no me rindo, no me quedo sin las ganas de imaginar que otra educación es posible, no me puedo quedar asumiendo pasivamente la realidad y la oferta que se nos presenta.
Así, desde mi posición de madre, sólo puedo tomar las riendas del que es mi entorno, mi familia, mis hijos... y realizar esos pequeños cambios en el día a día, apostando por la educación que nosotros consideramos, sintiendo que es lo mejor para ellos (como hacen todos los padres, no?) y no esperando garantías de nada, esperando sólo que ellos sean felices.
Antes de cerrar el post, unas citas que hoy me encontré en facebook de la mano de Alberto Camps relacionadas con esta cuestión:
"Supongo que es porque casi todos los niños van a la escuela hoy en día, y tienen las cosas ordenadas por ellos, que parecen tan tristemente incapaces de producir sus propias ideas." Agatha Christie
"Tenemos que devolver a los niños tiempo libre desde ya mismo porque esa es la clave para el auto-aprendizaje, y debemos re-introducirles en el mundo real tan rápido como sea posible para que el tiempo libre pueda ser gastado en algo más que abstracciones". John Taylor Gatto