Revista Cultura y Ocio
Con algo de retraso quiero desde estas páginas recordar yo también a Jose Antonio Labordeta.
Ayer en casi todos los informativos mostraban la escena en que ya harto de tanta sinrazón, se enfrenta a un grupo de parlamentarios y les lanza su ya famosa frase"A la mierda". Expresaba de forma contundente, cercana, quizás para algunos incorrecta, su cansancio y su rechazo a esa "ciudadanía parlamentaria" ajena al progreso, al respeto a miradas abiertas. En definitiva, su rechazo profundo a ese conservadurismo feroz, hipócrita e inflexible.
Hoy en que prima lo politicamente correcto, también lo descafeinado, quiero recordarle así: "A la mierda". Quiero recordarle con esa capacidad que mostraba para significar su rechazo y saber decir basta en un lenguaje cercano y directo.
Pena que se haya ido aunque nos queda su voz y sobre todo su ejemplo.
Te recordaremos siempre, José Antonio!