
Imagen: Gustav´s
Se está hablando estas últimas semanas de la posibilidad de que se esté formando una burbuja 2.0 por la posible sobrevaloración de determinadas empresas tecnológicas y la posibilidad de que eso fomente una inflacción en el sector parecida a la que se vivió en torno al año 2000 y a la que acabamos de sufrir en el sector inmobiliario.
No tengo una opinión formada sobre el tema todavía, pero habiendo vivido las dos anteriores como profesional de la empresa y después de asistir el pasado jueves al Iniciador Galicia, donde intervinieron Dani Seijo e Iñaqui Arrola como empresarios del sector tecnológico, sí tengo claro que aunque puedan existir las burbujas, no le explotan a todo el mundo.
Dani Seijo, ni modelo de negocio ni inversión
Dani Seijo empieza desmontando todas las estructuras de lo que en teoría es un proyecto emprendedor. Diario Motor empezó sin modelo de negocio y con una inversión total de menos de 50 euros (4 socios y 14 euros cada uno) y nunca, en seis años de existencia, han necesitado financiación.
¿Cómo ha sido posible, entonces, que hayan sobrevivido tanto tiempo y tengan aproximadamente 700.000 usuario en su web? Hay varios factores, la autoexigencia, el inconformismo que obliga a una constante búsqueda de cómo mejorar y un mercado perfectamente definido, todo lo que rodea al motor.
Ese mercado es la clave “a los que nos gustan los coches nos seguirán gustando mañana, el año que viene y dentro de 20 años” y ese es un potencial que hay que explotar, de ahí la transformación que va a sufrir Diario Motor y lo que hay detrás. Servicios a los aficionados y a las marcas, no importa que el sector del automóvil esté en crisis, “la crisis es de ventas de vehículos, no de afición al motor y lo que hay alrededor”.

Iñaqui Arrola, empresario y persona antes que millonario
Iñaqui Arrola uno de los más conocidos emprendedores españoles del sector internet gracias a sus portales Coches.com o Autodescuento.com expuso un punto de vista mucho más personal. Eso sí, igual de útil.
Nada de recetas mágicas, nada de milagros empresariales, mucha dedicación, disfrutar con el trabajo y que éste no anule la vida familiar. Los pies bien puestos en el suelo pero a la vez el suficiente atrevimiento para no quedarse en el intento y lanzarse en el momento en que hay una oportunidad.
Cuando disfrutas de tu trabajo, cuando te sientes satisfecho de haber creado algo que funciona y que da trabajo a más de una docena de personas, que también disfrutan de tu trabajo, no te paras a pensar en valoraciones o en ofertas de compra de la compañía.
¿Por qué a ellos no les alcanzaría la burbuja?
En el caso de que efectivamente se produjera la burbuja 2.0 no creo que afectara a Dani e Iñaki. En primer lugar porque no forman parte de ella, para ellos no se trata de pelotazos empresariales, se trata de trabajo y de disfrute, se trata de tener claro lo que se quiere y de los límites que no hay que traspasar.
Se trata de utilizar las herramientas que nos pueden facilitar el fin deseado y de saber utilizarlas bien. Se trata de que detrás de las empresas están las personas y si éstas tienen claro lo que pretenden y cómo conseguirlo sin necesidad de estrategias inflacionistas, así la burbuja es muy difícil que se infle.
Por supuesto una charla de dos horas da más para intuiciones que para certezas pero, por lo que me han transmitido, no creo que a ellos les explote la burbuja.