Sólo el 10 por ciento de los 63 millones de trabajadores domésticos a nivel mundial cuentan conseguridad social, de acuerdo con cifras de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). De éstos, el 30 por ciento están excluidos por completo del alcance de la legislación laboral de los países.
El trabajo doméstico representa el 3.5 por ciento del empleo de las mujeres a nivel mundial y en algunas regiones como América Latina y el Caribe, 1 de cada 6 mujeres trabajadoras se dedica a las labores domésticas constituyendo una parte considerable de la fuerza de trabajo en empleo informal, el cual se encuentran entre los grupos de trabajadores más vulnerables.
"Condiciones de trabajo deplorables, explotación laboral, y abusos de los derechos humanos son los problemas más graves que enfrentan los trabajadores domésticos", alertó el organismo internacional al tiempo que hace un llamado a los gobiernos -incluido México- a ratificar el Convenio 189 a fin de garantizar la protección de sus derechos laborales, incluida la seguridad social y la pensión.
Si bien el número de hombres que trabaja en el sector es considerable - a menudo como jardineros, chóferes o mayordomos - cabe destacar que sigue siendo un sector en el que predominan las mujeres, que suman más del 80 por ciento pues a nivel global 8 de cada 10 trabajadores domésticos son mujeres.
En México laboran poco más de 2 millones de trabajadores que realizan actividades en los hogares, la gran mayoría sin prestaciones ni seguridad social, situación que para el gobierno federal es una prioridad y ya está buscando revertir esta situación mediante iniciativas que en breve serán presentadas al Congreso de la Unión.
Los trabajadores domésticos a menudo soportan salarios muy bajos -apenas el 5 por ciento ganan el salario mínimo-, horas de trabajo excesivas entre 12 y 14, día de descanso semanal no garantizado y en ocasiones se enfrentan a situaciones de vulnerabilidad frente a abusos físicos, mentales y sexuales o a limitaciones en su libertad de movimientos.
La explotación de los trabajadores domésticos puede atribuirse en parte a lagunas existentes en la legislación laboral y del empleo de los países, aunque a menudo es el reflejo de un trato discriminatorio por razón de sexo, raza o casta. Esta cifra ha crecido en los últimos ańos a un ritmo constante en los países desarrollados y en desarrollo.
Habida cuenta de que la abrumadora mayoría de los trabajadores domésticos son mujeres, el derecho a la protección de la maternidad es una preocupación que reviste especial importancia. En la actualidad, más de una tercera parte de todas las trabajadoras domésticas no tienen ni derecho a la licencia de maternidad ni a las prestaciones de maternidad en metálico asociadas.
De igual forma en muchas de las legislaciones, particularmente en países de Medio Oriente donde la situación se agrava, no contemplan un límite de horas de trabajo semanales y el 45 por ciento no prevé el derecho a periodos de descanso.
Fuente
Puzzle Bobble
Karate Blazers
Puzzle De Bloques
Magical Cat Adventure