Hoy no hago la crítica de ningún libro sino la expresión de un sentimiento. Gracias por permitirlo a quienes lo leáis.
En clase te sentabas en primera fila
eso era suficiente; iluminabas la estancia
Tu curiosidad y participación constante,
razonamientos acertados
capacidad de moderación
rebeldía loable ante la injusticia.
Tu encanto.
Apasionamiento firme en el debate
Luchadora incansable
Felicidad incesante
Dulzura de piel blanca y rizos castaños
Tu nombre, como el de las heroínas griegas,
revelaba tu personalidad.
Mirarte era bastante, inundabas de paz
Te fuiste cargada de proyectos
para superarte a ti misma,
para ayudar a los demás.
Se apagó el SOL
Ya no la veré por la calle
y me reconfortará en día lluvioso.
Me queda su calor, que llevo dentro
y la seguridad de que allá donde estés
seguirás alumbrando estos corazones
rotos, sollozantes, que has dejado
hasta conseguir que sonrían otra vez.