El evento deportivo más seguido del mundo, con permiso de las Olimpiadas, ya está en marcha y en pleno apogeo. El balón echó a rodar el pasado jueves 7 y desde entonces ya hemos vivido posiblemente lo que marcará y por lo que se recordará este Mundial que se celebra en Rusia: el VAR (Video Assistant Referee)... o lo que es lo mismo pero en español, el vídeo arbitraje. Aunque también hay otra novedad tecnológica: un dispositivo que le transmite al árbitro, vía una pulsera que lleva, si el balón ha entrado o no en los llamados "goles fantasma". Técnicamente recibe el nombre de "Tecnología del gol". Ahora hablaremos de todo ello.
Aparte de seguirse en todos los rincones del planeta, con audiencias televisivas enormes, es muy llamativa la presencia, cada vez más exótica, de los hinchas de cada selección, o los futboleros del lugar que muestran simpatía y siguen a alguna selección en concreto. Y es que el fútbol es de otra dimensión. Y un Mundial es algo incomparable.
Siguiendo con lo del VAR, realmente solo tiene poder de actuación en cuatro supuestos: penalties, goles, tarjetas rojas directas y errores de identidad al expulsar a un jugador. Pero ya se ha puesto en acción e incluso en el partido de Francia de ayer, el árbitro no apreció penalty en una acción y en menos de un minuto el árbitro-jefe del VAR, le comunicó la acción punible y el árbitro, que siempre tiene la última palabra, pitó penalty. Yo creo que es muy positiva la introducción de la tecnología en los deportes de alta competición. Con la de dinero que mueven, no pueden depender de decisiones de un árbitro que tiene que tomar en un segundo sin posibilidad de repetición de la imagen... y los escándalos que ello genera. Tantas polémicas crean incluso animadversión que llega a actos vandálicos y más ahora con las redes sociales, propagando los teléfonos personales del árbitro en cuestión o de su pareja... sólo veo cosas positivas en ello... mientras funcionen bien y rápido, claro está.
Entramos ya en la segunda ronda de partidos de la fase de grupos. A partir de mañana ya puede haber equipos que tengan que hacer las maletas pese a faltarles un partido por jugar... y luego viene lo bueno: las eliminatorias.
El fútbol no deja de ser un juego y como tal, influyen muchos factores en el resultado final. Los favoritos son los de siempre pero hoy en día cualquier selección es competitiva. España sigue siendo una incógnita tras la puñalada trapera de Florentino y Lopetegui, aunque los medios de comunicación nacional-madridistas no se atreven apenas a denunciarlo. Hoy, el fiscal del caso Nóos Pedro Horrach, ha denunciado en una entrevista en "La Vanguardia", que por primera vez en su carrera, ha recibido presiones por citar a declarar a Florentino, quien aducía para que no se le citara, ser amigo del fiscal general del Estado y del Director General de la Policía. Tuvo que declarar, no sin antes intentar hacerlo por teléfono. Y el fiscal afirma haber recibido "llamadas disuasorias". Éste se cree por encima del bien y del mal, impune a cualquier cosa. Luego se queja de que exista tanto antimadridismo en España y en Europa y que vaya creciendo. Con esas malas maneras y esa chulería, despotismo y desprecio con la que actúa, ¿qué quiere que ocurra?.
Perdón, es que me ha sentado muy mal la "guarrada", porque no tiene otro nombre, que le ha hecho a la selección y por la que ha sido criticado por medio mundo futbolístico. No confiaba en que España ganara el Mundial, pero puede servir hasta de revulsivo. Por lo demás, favoritos los de siempre... Alemania pese a perder, Brasil pese a jugar fatal, Bélgica puede ser la sorpresa, Argentina pese a empezar muy mal, Francia e incluso Rusia y alguna que se me olvida por ahí... y España, claro está.