Nuevo estreno veraniego en busca del taquillazo por parte de Santiago Segura. Siguiendo la estela familiar de sus últimos proyectos, A todo tren: Destino Asturias (2021) cuenta la historia de Ricardo, un padre responsable que es elegido para llevar a la clase de su hijo a un campamento en Asturias. Sin embargo, no cuenta con que en el último minuto le acompañe Felipe, abuelo de dos de los niños, un tipo extravagante e irresponsable. Cuando el tren arranca sin Ricardo ni Felipe pero con los niños solos dentro, comenzará una disparatada persecución por parte del padre y del abuelo para alcanzar al tren, y un alocado viaje por parte de los niños donde harán todas las travesuras que no se atrevían a hacer delante de los mayores.Santiago Segura siempre ha buscado asegurarse el taquillazo en todas sus producciones. Desde que Torrente, el brazo tonto de la ley (1998), su ópera prima, se convirtiese en todo un éxito en las salas, el director, actor, guionista y productor ha sabido explotar los gustos populares. Con la creación de aquel repulsivo y satírico personaje de clara vocación adulta, Segura supo ir enfocando su carrera hacia una reproducción de comedia basta donde la aparición de personajes de la cultura popular era el principal atractivo.Con ello logró cinco entregas llenas de éxito, pero que empezaban poco a poco a estancarse en el desinterés, además de perder un público adulto cada vez menos dispuesto a convocarse en masa en las salas de cine. Segura, muy inteligente siempre a la hora de visualizar dónde se encuentra la demanda, dio continuidad a su idea de cine de "amiguetes" (con la aparición de personalidades televisivas) pero dejando atrás el personaje que le había dado la fama. Esa transición, complicada por la asociación exclusiva de más de 15 años entre Segura y Torrente, la hizo Sin rodeos (2018), el remake de una película chilena.El cineasta había comprobado que el efecto remake empezaba a tener una aceptación muy amplia, pues casi todos los últimos éxitos de la taquilla española venían de ahí (Kiki, el amor se hace, Perfectos desconocidos, El mejor verano de mi vida...). De este modo, Segura planteó una transición que mantuviese parte de la comedia adulta que le caracterizaba, pero acercándose un poco más al humor blanco. Ello le dejó el camino libre para que, por fin, se le desligase del personaje de Torrente y pudiese comenzar una nueva etapa de popularidad familiar, "A todo tren: destino Asturias" es un buen ejemplo.
Esta nueva etapa se puede asociar también al nacimiento de sus hijas (quienes actúan en sus últimas películas), pero es imposible dejar de ver en ella la clara revelación de que el cine infantil y familiar es el que actualmente convoca a más público en las salas. Es un momento donde las plataformas han adquirido a gran parte del público adulto, las salas de cine siguen siendo un oasis de escapatoria para las familias con pequeños. De este modo, llegaron los éxitos de Padre no hay más que uno (2019) y Padre no hay más que uno 2: La llegada de la suegra (2020), a la que le sigue ahora A todo tren: Destino Asturias. Todas ellas marcadas por el fenómeno remake, así como por la aparición de Segura en el papel principal, al que se le suman niños actores y unas cuantas caras conocidas del panorama cinematográfico español.
La exigencia es mínima, y los chistes algo rancios (aunque no excesivamente adultos) para los padres, así como el humor infantil para los niños, cumple un papel básico para que toda la familia salga contenta del cine. El principal problema de estas cintas es que están lejos de una mínima calidad cinematográfica. Rodadas casi como series de televisión, donde la plana fotografía y los abundantes planos medios de personajes (así como el montaje errático de las conversaciones) muchas veces van en contra de la agilidad que necesita un gag cómico. Estas cintas acaban siendo fast food sin mucho sabor ni alimento.
Lo demás sigue siendo lo que es... amigos haciendo cameos y un humor que no sabe calibrar entre lo rancio y lo infantil. Aunque se destaca, eso sí, que la aventura tenga algo de ritmo y objetivo, de persecución y destino en diferentes escenarios, que se echaba en falta en la anterior película del cineasta. Probablemente, A todo tren: Destino Asturias sea todo un taquillazo para las salas españolas, lo que es de agradecer para nuestros exhibidores en momentos tan preocupantes, pero a este cine popular debería exigírsele algo más: un mejor timing para las bromas, una dirección de actores más esmerada o un guion que se salga de los habituales chistes de "cuñado" y de los cameos siempre repetidos de la marca Segura.
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- ##check## Lo bueno
- Es el producto que el público de Padre no hay más que uno busca.
No sorprende pero tiene claro lo que funciona. - ##times## Lo malo
- Es una película de manual que funciona con los mismos chistes que llevan protagonizando este tipo de películas los últimos 20 años.
Segura traslada su humor chusco de Torrente a un humor mucho más blanco para todos los públicos.
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- Ambientación 5.5
- Una ambientación sencilla y funcional. No muy destacable, pero suficiente para sus aspiraciones.
- Desarrollo de Personajes 4.0
- De manual, pero suficiente para ocasionar chistes o escenas cómicas con la forma de ser de cada uno, pero sin nada más.
- Argumento / Guión 3.0
- Trama básica y sencilla para hacer unas cuantas escenas de humor y poco más. El guion es bastante pobre, cayendo en gracia con dos o tres chistes.
- Banda Sonora 6.0
- La música, con un tono de aventura infantil, le pega bien al tipo de producto que es.
- Entretenimiento 5.0
- Quien busque lo mínimo, seguramente se entretenga. Es un producto familiar que cumple con lo básico, pero al resto le aburrirá.
- Montaje / Innovación técnica 4.0
- Bastante malo. El montaje es torpe, sobre todo en los diálogos, y la innovación bastante escasa. Al menos no cantan mucho los efectos visuales y para esta clase de película son bastante salvables.
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- Puntuación Total 4.5 / 10