Revista Coaching
No hace falta llegar a la famosa frase de "a veces es mejor callar a riesgo de parecer tonto, que hablar y despejar dudas", frase que ya os comentaré oto día en que foro se dejó caer...
Sin embargo, las reuniones mejorarían sustancialmente si la gente se preocupara más de comunicarse e intercambiarse información de mutuo interés, con el fin de obtener o de “regalar” aquellos datos, opiniones... que realmente pueden facilitar el trabajo del otro, en lugar de buscar el lucimiento personal o apuntalar esa falsa creencia de que el que más habla es el que más tiene que decir...
No deberíamos olvidar que la luz viaja más rápido que el sonido. Esa es la razón por la que algunas personas parecen brillantes, hasta que se ponen a hablar.