Revista Opinión

A ver que sucede

Publicado el 01 febrero 2016 por Javier Marcos Angulo @clamorsegovia

A ver que sucede
El pasado viernes, 29-01-2016 escribí sobre la desigualdad social. Así, dicho sin más, casi nadie repara, y como diría un conocido mío, eso, no es noticia.
Efectivamente no es noticia, pero no es noticia 'nueva', 'exclusiva', o como se quiera denominar esa terca desigualdad social en la que nos han instalado los que nos han gobernado y siguen gobernando.
El hecho en sí es que, a lo largo de muchos años, tantos como los que van desde que se aprobó nuestra Carta Magna hasta nuestros días, se han ido acumulando esas desigualdades, ya que la realidad es muy tozuda, se empeña en hechos que suceden día a día, sin casi dar tiempo a comentar y analizar día a día.
Por ello, por ese motivo que expongo, es por lo que dicha desigualdad social, al parecer, ya no es noticia. Nos ha superado la realidad contante y sonante.
Sí, sonante, sobre todo en las rugientes tripas de las personas que poco tienen que comer, e incluso algunas de ellas, nada que llevarse a sus estómagos vacíos.
Esa es la estresante realidad que los políticos no les interesa, ni siquiera comentar.
La realidad, no necesita ser explicada, está ahí continuamente. Otra cosa es que tenga razón de suceder. Esto, es harina de otro costal.
La realidad es como ese grifo que por mucho que cierres bien la llave, no sabes por qué sigue goteando, unas veces con más abundancia y otras con menos, pero sigue goteando.
Por mucho que nos digan los políticos y no políticos que la corrupción, son hechos aislados, la realidad está ahí y sigue diciéndonos que dicha corrupción sigue y sigue, y además, nos mosqueamos mucho, pues esos mismos políticos, quieren e insinúan que no sabían nada, que se han enterado por la prensa, que todos son presuntos, sean imputados o investigados y que por supuesto, ya dirán los tribunales lo que tengan que decir.
Pero ahí está la 'madre del cordero', que es muy probable que esa realidad, no nos la muestren hasta pasados varios años, y entonces, es probable, que ni siquiera algunos ya no estemos en este mundo.
Por tanto, espero y deseo que la realidad se transforme en hechos fehacientes y concretos y dejemos de esperar a ver qué sucede.

Volver a la Portada de Logo Paperblog