Revista En Femenino

A vueltas con el colecho

Por Felizenbrazos

Cada dos por tres leemos cosas sobre el tema de compartir cama con nuestros hijos. Yo he escrito en varias ocasiones sobre el tema, como podéis leer aquí y aquí.

Como en todos los temas de crianza, hay opiniones para todos los gustos, y todas son respetables, cada uno con sus hijos hace lo que cree mejor. Pero muchas veces, debido a malos consejos o a situaciones que se prolongan en el tiempo y que por ese motivo creemos que son las correctas, la gente no hace lo que quiere o lo que le pide el cuerpo.

Colechar o compartir la cama no es algo nuevo, al contrario, es algo que se ha hecho siempre. Pensemos en las cuevas, donde todos dormían juntos, no había cuevas separadas para los miembros de la familia. Y durante muchos años, las casas constaban de una sola estancia en la que se comía, se cocinaba y se dormía y todos los miembros de la familia compartían el mismo espacio. Es en la Edad Media, con la llegada de casas más amplias, cuando se empiezan a hacer estancias para los hijos. Y parece que por aquella época en la que el control de la natalidad no se conocía o estaba prohibido y en la que nacían más bebés de los que los padres se podían permitir alimentar, algunos padres “ahogaban” a sus hijos pequeños o los “aplastaban” accidentalmente mientras dormían, con lo que se prohibió compartir cama con los bebés.

¿Qué hay de cierto en eso? Imagino que realizar estudios al respecto debe ser complicado y hay muchísima información al respecto, información que avala dormir con los bebés como lo más seguro e información que dice lo contrario. Evidentemente, esto depende de muchos factores que habría que tener en cuenta a la hora de dar cierto tipo de información.

La lactancia materna previene el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante. Dormir con el bebé fomenta la lactancia materna. Por lo que se puede deducir que dormir con el bebé previene el SMSL

En países donde compartir cama es lo normal, los índices de SMSL son mucho menores que en países occidentales, así que parece que ese también es un factor a tener en cuenta a la hora de decidirse por esta postura.

Pero hay caso en los que colechar está contraindicado: la obesidad (no hablo de estar gordito, hablo de ser obeso); fumar; tomar drogas, alcohol o medicación que disminuya el estado de alerta; dormir en camas demasiado blandas, con cojines y objetos sueltos, con mantas y muñecos y dormir en sofás. Tomando unas pequeñas medidas de precaución, dormir con los bebés puede salvarles la vida, como conté en el otro post sobre lo que le pasó a Sara .

El otro día, una amiga de viaje por Nueva York me mandó esta foto y a raíz de publicarla en mi página de Facebook, me he decidido a escribir de nuevo sobre este tema.

cartel informativo colecho

Lo primero que me llama la atención es que el cartel está en español y muestra a un bebé afroamericano. Parece que está dirigido sólo a la población hispanoparlante, lo que me molesta un poco, pues me parece discriminatorio. Aunque también tengo que decir que desconozco si al lado está el mismo cartel en inglés. Es cierto que en un país donde las tasas de obesidad son las mayores del mundo, compartir cama con el bebé puede ser más peligroso que beneficioso. Pero el dato de que cada año mueren unos 50 bebés debidos a lesiones mientras duermen es muy vago. ¿Cuántos de esos bebés murieron aplastados por sus padres? ¿Cuántos realmente murieron asfixiados por otras causas como objetos sueltos? ¿De los bebés aplastados por los padres, cuantos no cumplían las normas básicas de seguridad para compartir cama? Y voy un poco más allá, ¿Cuántos bebés se han librado de un SMSL gracias a compartir cama con los bebés?

No conozco en primera persona la cultura americana, y me consta que cada vez más mamás optan por una crianza natural, por la lactancia materna, por usar portabebés y por compartir cama con ellos. Famosas y no tan famosas salen cada día como muestra de ello. Personalmente sigo varios blogs de mamás americanas que comparten mi filosofía de crianza. Pero también creo que eso no es lo más extendido. Para ellos, lo normal o habitual es que el bebé duerma aparte, en su propia habitación desde bien pequeño. Prueba de ello son las cientos de películas que he visto en las que los bebés están solos en sus habitaciones y vigilados por un intercomunicador. Todavía no he visto ninguna película en la que compartan cama. Sí he visto por el contrario películas en las que usan portabebés o en las que hablan/muestran la lactancia materna, y siempre que lo hago capturo esas imágenes para compartirlas en mi página de Facebook. En cuanto vea por primera vez una peli americana mostrando escenas de colecho, seréis los primeros en saberlo.

Para mí, para nosotros, compartir cama ha sido lo más natural, lo más cómodo y como todo, ha evolucionado en el tiempo. Primero estaba la cuna pegada a nuestra cama, aunque no la usábamos y dormía entre los dos, con un cojín antivuelco, más que para que ella no se moviera era para sentirnos nosotros más seguros y no aplastarla. En este tema, tengo que decir que al principio, duermes tan en vilo que creo que sería imposible aplastar a tu bebé, estás en alerta. Cuando fue creciendo, el cojín dejó paso a la cuna sin barrotes pegada a la cama, donde a veces rodaba una vez dormida. Cuando la cuna se quedó pequeña, la cambié por una cama pequeña, moví mi cama más hacia la ventana para hacer sitio a la suya, y así tenemos una cama enorme… A veces se pasa la noche en su cama, a veces se mueve y se pasa a la mía y a veces se tumba casi encima de mí y yo duermo en una esquina mientras casi 2 metros de colchones están vacíos.

colecho

Cada familia tiene que buscar la opción que más se adecúe a sus necesidades. Bajo mi punto de vista, dejar a los bebés solos desde el nacimiento en una habitación apartada me parece un poco desapegado, pero respeto a los padres que optan por esta opción. Aunque creo que lo más importante es tener toda la información y con ella en la mano, poder decidir. Quizás en la ciudad de Nueva York deberían hacer más hincapié en mantener hábitos de vida saludables que prevengan la obesidad que en apartar a los bebés de sus padres. Aunque mirando la parte positiva, en el cartel informativo recomiendan no compartir cama, pero sí estar cerca, por lo menos los bebés no se sentirán tan solos y lejanos de sus padres.


A vueltas con el colecho
A vueltas con el colecho
A vueltas con el colecho

Volver a la Portada de Logo Paperblog