La nueva consola de Nintendo no lleva ni una semana entre nosotros y ya parece estar creciendo en torno a ella una no muy contenta multitud de usuarios.
Engolosinados, me incluyo, como estábamos con esta original propuesta de la gran N, sin duda no éramos capaces de imaginar ni de lejos la cantidad de problemas que, caja en casa, comienzan a aparecer después del dinero (¿mal?)-gastado.
Y es que, con el lanzamiento de wii U en EEUU han aparecido ya las primeras impresiones para nada positivas sobre ella, que presenta unas lagunas tan desconcertantes para los usuarios que hacen que parezca más una chapuza que una consola next-gen como se nos vende en la campaña publicitaria.
El mayor problema que encuentran los estadounidenses que ya disfrutan de la wii U es la lentitud de la interfaz, no sólo en la carga si no en el manejo de la misma, propiciada por pobres o contradictorias explicaciones que crispan los nervios del jugador a priori emocionado con el nuevo cacharrito de Nintendo.
En primer lugar, tus ganas de disfrutar con juegos de comunidad online se ven frustrados. ¿Quieres jugar? Al parecer deberás descargarte una actualización masiva del firmware que durará horas y que, por tu bien, será mejor que no canceles o puedes dar por perdida tu nueva Wii U.
Dentro como estamos de una avalancha de redes sociales y una marea de actualizaciones y contactos, el universo Mii, Miiverse, parecía una aplicación bastante sugerente para poder interactuar con nuevos amigos que compartieran tus juegos y gustos dentro de la nueva consola. Parece ser que, de momento, las ilusiones en este caso también sobrepasan la realidad.
Miiverse, una especie de Twitter con algunas funcionalidades añadidas es, de nuevo, LENTO. Tarda en cargar 5 o 6 segundos cada feed, algo que no es en absoluto normal en el momento tecnológico en el que nos encontramos.
Además de esto, Miiverse presenta una censura bastante radical en las informaciones de perfiles y que sugiere a los usuarios la intención de Nintendo de ocultar toda la información que pudiera ser en algún momento real de los jugadores.
Por último, tratamos el GamePad de U, que vendían como la tecnología del futuro y que, por lo que vemos, no es más efectiva de lo que lo es un Ipad con una xbox 360. Si le sumamos a esto que el táctil en el GamePad opone bastante resistencia a nuestras manos, nos encontramos ante un nivel de indignación tal que termina explotando cuando nos dan la bienvenida en la pantalla de inicio botones inútiles como la TV de Nintendo (aún inexistente).
Ya lo vaticinaba Nolan Bushnell, fundador de Atari, en un artículo del New York Times donde hablaba de una decepción de los consumidores cuando descubrieran el poco avance teconológico que suponía la Wii U.
Estoy desconcertado con ella. No creo que vaya a ser un gran éxito. Estas cosas continuarán, pero dudo que vayan a tener gran calado de nuevo. Para mí es el fin de una era.
¿Se deben estos errores a una pronta crítica por parte de los usuarios? ¿Se merece Nintendo una temporada de prueba o debería ser más consciente de la responsabilidad que su nombre carga?
De momento tendremos que esperar al 30 de Noviembre hasta poder ser nosotros los jueces de Wii U. ¡Paciencia!
Fuentes: Wired