Disculpen el retraso...he sufrido una crisis creativa de proporciones épicas, he estado ocupado y además bastante vago.
El gran Emi, blogger hiperactivo y como buen argentino apasionado del balompié, dijo recientemente en Futcast "Lavolpe es el único arquero que ha triunfado como técnico" y "El arquero es para el fútbol lo que el baterista a una banda de música", "Son gente muy solitaria en los entrenamientos y eso les marca a la hora de manejar un grupo." Todo esto surgió por la destitución de Abel Resino como entrenador del Atleti.
La verdad es que no tengo a mano datos ni estadísticas suficientes, pero he de dar la razón a Emi, hay pocos porteros que hayan triunfado en el banquillo y quizás las razones que da Emi sean las culpables. Dominamos un área de juego muy limitada, entrenamos muy diferente y tenemos otras preocupaciones, no digo que el hecho de ponerte unos guantes de latex te incapacite para ser entrenador, pero la posición no ayuda a formarte como entrenador.
Otro caso de futbolista que normalmente no triunfa como entrenador es el fubolista genial, claro ejemplo, Diego Armando Maradona...probablemente el futbolista que mejor ha tratado el cuero en la historia de este deporte, tiene muchísimas carencias como técnico. Su nombramiento como seleccionador de Argentina fue para aprovechar su poder como icono nacional porque sus guarismos como entrenador eran realmente malos. A mi juicio la razón es que Maradona nació con talento, nadie le enseñó a jugar al fútbol y por ello no sabe transmitirlo, también este tipo de jugadores suele ser más anárquico y eso de la táctica les suena a jeroglífico egipcio.
Y por último tenemos al tipo de jugador que se ve que más tarde o más temprano va a acabar entrenando y encima haciéndolo bien, por supuesto el que haya leído el título del post ya sabe que me refiero a Pep Guardiola. Este tipo de jugador es el canalizador del juego, es el primero que ataca y el primero que defiende, es la pieza clave del equipo y desde joven se empapa de todos los aspectos tácticos del juego tanto ofensivo como defensivo y si encima se ha pasado toda su vida en can Barça jugando a lo mismo...es mucho más probable obtener un entrenador de éxito.
Seguro que a estas reglas hay millones de excepciones, incluso hay casos de entrenadores con mucho éxito que nunca fueron futbolistas, pero supongo que en algo influirá la experiencia de en el fútbol.