Abertis visualiza a Reynés como la mano derecha de Alemany

La aprobación de las cuentas de 2009 por parte de la junta de accionistas de Abertis, la primera presidida por Salvador Alemany, constituyó todo un ‘paseo triunfal’ para el consejo de administración si de alguna manera la tuviéramos que calificar.
Y no es porque los resultados del pasado ejercicio fueran excelentes. De hecho, fue un año complicado donde los accionistas acabarán cobrando el mismo dividendo que en 2008, 60 céntimos.
La única cuestión algo complicada con la que tuvo que lidiar Alemany se la planteó un antiguo accionista en relación a la dificultad que está teniendo la cotización del valor en Bolsa relacionándolo con la voluntad expresada públicamente por el accionista principal, ACS, de desprenderse de un porcentaje. Alemany no afrontó la respuesta de manera directa, - dos asientos a su derecha se encontraba Florentino Pérez, el presidente de ACS y vicepresidente del grupo de concesiones de infraestructuras-, y para no hacer un juicio de valor sobre ello centró su respuesta en la desinversión o reducción de participaciones de manera acelerada que diversas cajas de ahorro han ido realizando desde 2007 y los problemas que se han producido de manera puntual sobre la cotización al producir aumentos repentinos en el free float.
Conocidas las cifras de 2009 interesa conocer las previsiones sobre la evolución del negocio a lo largo de este año. La empresa presentará los datos del primer trimestre el próximo 13 de mayo pero Alemany avanzó que las perspectivas son de ligero crecimiento en ingresos y Ebitda, centrado en los negocios provenientes del exterior que supusieron en 2009 el 48% del negocio, sobre todo las áreas de aeropuertos, aparcamientos y las autopistas francesas y chilenas. El negocio en España, principalmente las concesiones, sigue sin aportar crecimiento a los flujos de caja. Se espera sin embargo que las cosas empiecen a cambiar a partir del segundo semestre.
El crecimiento esperado provendrá fundamentalmente de la puesta en valor de las adquisiciones realizadas el año pasado (los activos de Itinere), de la reducción de los costes de explotación, y del desarrollo de las líneas de negocio clásicas
Decir por último, que la junta sirvió de ‘puesta de largo’ del director general corporativo, Francisco Reynés, que aunque había fichado por Abertis hace 11 meses, proveniente de Criteria, aún no se había estrenado en ningún acto público. La junta ha sido la plasmación que Reynés está llamado a responsabilidades mayores. De hecho es el único director general de los tres que es consejero.
Las consecuencias sobre los negocios de Abertis de los desastres naturales del terremoto de Chile y de la erupción del volcán islandés han sido inicialmente valoradas por los expertos de Abertis como irrelevantes en la cuenta de resultados de este ejercicio. Una estimación lo cifra en torno al 0,1% del Ebitda, en torno a los 2,5 millones de euros.