En Inglaterra quieren dar otra vuelta de tuerca a la provisión de servicios sanitarios en el NHS, y han propuesto de forma oficial que la asistencia sanitaria más completa de lunes a viernes, se amplíe a todos los días de la semana. La evidencia es bastante clara al respecto, ya que los fines de semana implican un mayor riesgo para los pacientes hospitalizados. Esa nueva asistencia 7/24 implica aumentar los servicios que se prestan durante los fines de semana, más presencias, más profesionales trabajando, etc. ¿Puede el sistema asumir ese cambio? ¿Quieren los profesionales asumirlo? ¿Es mejor para el paciente?
En el NHS ya llevan unos años estudiando esta reforma, y hay bastante documentación al respecto de hace unos años. Este documento de NHS Improving Quality es bastante interesante ya que plantea las bases del nuevo modelo, proponiendo varios niveles de asistencia tal y como se muestra en esta tabla:La guía incluye ejemplos como la unidad de endoscopias de lunes a domingo, el servicio de microbiología 7/24 en el Royal Free London NHS Foundation Trust o la fisioterapia para algunas patologías también de lunes a domingo. Hay muchos más ejemplos y la mayoría se asocian a mejor calidad y mejores resultados en salud para el paciente.
Pero hay mucho más detrás de este cambio. En The Guardian han planteado varias preguntas en este artículo sobre si existe una demanda real de este tipo de servicios, y también acerca del cambio laboral que implica para los profesionales. De hecho, la falta de recursos financieros y de mejoras para los profesionales puede lastrar la puesta en marcha efectiva de este tipo de medidas. El enfrentamiento es muy directo y quizás la solución no sea un cambio unilateral de las condiciones laborales de los profesionales del NHS.La difusión por parte del NHS de las bondades del cambio está siendo muy activa. Hay eventos por todo el territorio y mucha información en la red. Un buen ejemplo es esta reciente presentación sobre el tema que puede ser muy útil para entender el objetivo institucional:
Slides from the 'Improving access to seven day services' event June 2015 from NHS Improving Quality
Pero quizás ser tan radicales y poner en el centro de la diana los servicios de fin de semana no sea la mejor opción. Como cuenta Margaret McCartney en este artículo del BMJ, ahora los pacientes tienen miedo al fin de semana en el hospital, ya que la evidencia al respecto ha ido acompañada de titulares algo alarmistas en los medios. Tal vez antes de dar el paso, sería interesante analizar cada servicio, revisar si es necesario o no ofertar asistencia un domingo (por ejemplo), y proponer medidas alternativas como el uso completo de las tardes o la actividad en sábado.En España esta es una de nuestras asignaturas pendientes y tal vez sea el momento de revisar la tabla de los cinco niveles y revisar unidad por unidad. Tardes sin actividad quirúrgica y de consultas (salvo la urgente y una pequeña parte de la programada), infraestructuras de máximo nivel sin uso y pacientes esperando cuando el quirófano está vacío. Claro que este cambio debería ir acompañado de una reforma en el sistema de trabajo, tanto en jornada de trabajo del profesional como en la estructura retributiva. Aunque claro, teniendo en cuenta que el turno de tarde parece un castigo, ¿quien quiere ser el primero? ¿hay que incentivar el turno de tarde? En algunos casos se intentó, pero el primer paso fue erróneo: incentivar ampliamente a los médicos y el resto del personal con cambio de turno. Un tema delicado y polémico, y quizás por eso, un tema del que hay mucho que decir y que escuchar. Y más cuando se mezclan las guardias (que a veces, pocas pero más de una, tienen su origen en una reivindicación salarial más que asistencial), la conciliación de la vida familiar y laboral, las costumbres y tradiciones de cada centro o los privilegios (que aún quedan) del personal fijo frente al temporal. ¿Quien lanza la primera piedra?