Abierto por vacaciones

No siempre conseguimos predicar con el ejemplo. En mi faceta profesional no me canso de reiterar la importancia de mantener vivo un blog o una red social, y para ello hay que pensar que no vamos a desaparecer de la noche a la mañana. Eso me ha pasado con mi querido espacio de maternidad. Llevo muchísimos meses desconectada pero no porque no quiera sino porque no puedo. Después de intentar en vano estirar las horas del día y verme amenazada por un alto nivel de agotamiento, me rendí a la evidencia y dejé de lado algunos de mis espacios en la red. También he sufrido, no nos vamos a engañar, una crisis de creatividad a nivel maternal. No quiere decir esto que no este disfrutando de mi faceta como madre sino que se me acabaron las ideas para el blog. Pero a veces un pequeño gesto, un simple detalle, despierta de nuevo a las musas que todos los que escribimos (o al menos lo intentamos) llevamos dentro. Después de meses de inactividad, recibí varios mails y vi cómo aparecían nuevos seguidores en el blog y pensé que sería un bonito detalle no defraudarlos. En todo este tiempo muchas cosas han cambiado en casa. De la noche a la mañana nos hemos convertido en cuatro adultos, dos a escala, pero cada vez más autónomos. Atrás han quedado carritos, pañales, lactancias... todo guardado en el baúl de los recuerdos, como decía la canción. Unos recuerdos preciosos, entrañables, que me encanta evocar con la satisfacción de haberlos vivido y haberlos superado con nota. O así lo creo yo. No me gusta regodearme en la nostalgia. Por eso exprimí esos años de tener bebés para no llegar a este punto y tener la sensación de haberme perdido algo. Pasito a pasito, mi pequeño gran hombre deja el parvulario y el año que viene se enfrenta con orgullo a la "escuela de mayores". Y mi pequeña princesa avanza con paso firme siguiendo la estela de su hermano y disfrutando con sus casi cuatro añitos de las grandes y pequeñas cosas de la vida. He decidido ir al revés del mundo y no cerrar por vacaciones como hacen otros blogs que, por cierto, leo aunque ya no me quede tiempo para comentarlos. Quiero aprovechar este periodo de vacaciones para reemprender las entradas de este blog maternal y no perder el hilo manteniéndolo igual de vivo que el resto de blogs que gestiono. Espero cumplir con mi palabra.