El Monasterio de Tomar es una de las grandes obras manuelinas y que después se fue enriqueciendo con los añadidos de Felipe II y Felipe III durante el periodo de monarquía hispano-portuguesa. Ya le habíamos dedicado una entrada tanto al recinto monacal como a su soberbio acueducto. Nos desplazamos de nuevo al conocer que se había restaurado una sinagoga –la única conservada en Portugal- y un museo dedicado a Abraham Zacuto.
El astrónomo salmantino Abraham Zacuto se exilió y trabajo para Portugal tras su expulsión en 1492. Los judíos también fueron expulsados del reino luso en 1496.

Las Tablas Astronómicas de Zacuto fueron fundamentales en la época de expansión de la navegación transoceánica de los reinos ibéricos. El resumen abreviado de las tablas de Zacuto editadas por su discípulo José Vicinho en Leiría (1496) tuvieron una gran acogida pues muchos asuntos claves como la longitud del lugar solo se podían medir con exactitud si se disponía de tablas con efemérides como los eclipses.
No esperábamos muchos documentos de Zacuto pero del astrónomo no hay más que el nombre. Algo es algo; se merece más pero –al menos- en Portugal se le recuerda y admira.
