¿Qué padres no recurren cuándo, lo necesitan, a los abuelos? Nuestros mayores ya no son esas personas que esperan su partida porque piensan que ya han cumplido su tarea. Los abuelos de hoy día son joviales, con ganas de disfrutar, de hacer todo lo que hasta ahora no habían podido, en definitiva, de vivir.
Esa actitud vitalista es la que hace que sus hijos cuenten con ellos para el cuidado de sus pequeños; unas veces de manera contínua y otras de manera esporádica.
La relación abuel@-niet@ es beneficiosa para ambos. Los abuelos aportan conocimientos basados en la
experiencia y los nietos las ganas de aprender.
¿Qué ocurre cuándo los abuelos pasan la mayoría del tiempo al cuidado de sus nietos? ¿A quién corresponde la labor de educarles? ¿Los padres han de adaptarse a los abuelos o los abuelos a los padres?
La resolución de estas cuestiones ha sido motivo de varias consultas. Padres que se ven contradichos por los abuelos perdiendo así, parte de la autoridad que le corresponde.
Elegir entre, que una persona desconocida cuide de tus hijos o que sean los abuelos quien lo hagan, muchos padres prefieren la segunda opción. Ésta, sin duda, a priori, parece la más cómoda, económica y fiable sin embargo, no está carente de conflictos.
Cuando eliges a una persona ajena a la familia para que cuide de tu hij@, eres tu quien marca las pautas de lo que quieres que se haga y cómo lo quieres (educación, horarios,...) ¿Harías esto con los abuelos? ¿Les exigirías que se ciñan a tus pautas educativas y de comportamiento?
La respuesta es SI, los abuelos han de intentar continuar vuestra línea educativa, han de educar de la misma manera que vosotros lo haríais.
El papel de padres y abuelos es distinto, cada uno ha de representar el personaje que le ha tocado por eso, todos han de pensar en el bien del niño, en su futuro como persona.
Los abuelos están autorizados para darle algún que otro capricho a sus nietos y, así mismo, también están obligados a ponerse serios cuando la ocasión lo merezca.
Para los padres que esteis en esta situación, hablad con los abuelos, explicadles cómo queréis que se comporten ante determinadas situaciones, estando vosotros presentes o no, sin olvidaros de agradecerles siempre, todo lo que están haciendo por vosotros.