MADRID - La ONG Acción Contra el Hambre (ACH) ha criticado este jueves la situación de los indígenas en el norte de Colombia, en la Sierra Nevada de Santa Marta, en la frontera con Venezuela, debido a los combates entre el Ejército del país y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Pilar Medina, una activista de ACH que trabaja en la zona, ha denunciado en rueda de prensa en Madrid "la invisibilidad de los indígenas en el conflicto". "El Estado tiene el control del territorio y el Ejército abusa así de las comunidades", denunció Medina, que aseguró que el Gobierno colombiano se niega a reconocer la guerra en la están inmersos estos indígenas, lo que impide la entrada de organizaciones humanitarias. ACH es la única que se encuentra en esta zona montañosa.
Jorge Mario, coordinador de Seguridad Alimentaria de ACH en Colombia, ha declarado que "cuando comienza la balacera, los indígenas se desplazan, pero no constan en ningún registro ya que no huyen hasta las ciudades, sino hasta otra vereda". "Muchas veces se van con lo puesto y cuando regresan está todo arrasado", ha explicado Mario.
Este activista asegura que las tribus no le piden comida, sino ayuda para volver a retomar su trabajo cuando los actores armados les destrozan sus formas de vida. Además, la ONG apoya los trabajos de artesanía de las comunidades como una forma de conseguir más ingresos para asegurar su seguridad alimentaria.
TRIBUS de 'HERMANOS MAYORES'
En la Sierra Nevada de Santa Marta se encuentran cuatro tribus principales: Kogui, Arhuaco, Wiwa y Kankuamo. Viven principalmente de la agricultura, y se consideran a sí mismos "Guardianes de la tierra", ya que creen que el corazón del planeta se encuentra en esta zona. Estas tribus son los "hermanos mayores" de la civilización humana, al ser los primeros sobre la faz de la tierra, lo que convierte al resto de las personas en sus "hermanos menores", según Custodia Gil Sauna, indígena de los Wiwa.
Gil Sauna, que se encuentra de visita en España para denunciar su situación, ha asegurado que no saben por qué pelean los distintos grupos armados. "Ellos hacen las masacres y a nosotros nos toca pagar los platos rotos", se ha lamentado.
"Cuando entran las FARC, nos acusan de colaborar con el Ejército; cuando entre el Ejército, nos acusan de colaborar con la guerrilla", ha denunciado Gil Sauna. Cuando se ven obligados a abandonar su tierra, esta wiwa cree que ir a la ciudad supone "perder la cultura y la tradición". "Vivimos de la tierra y todavía creemos en ella", ha explicado.
Esta indígena ha denunciado los que ha llamado "megaproyectos", la construcción de presas en Santa Marta para llevar agua a ciertas zonas del país, ya que considera que perjudican a la madre tierra. "Tenemos necesidades de salud y de tierra. Si no hay tierra, no hay salud", ha señalado.
Además, Gil Sauna ha denunciado las violaciones perpetradas contra los indígenas por parte de los grupos armados que han provocado que el sida se extienda en sus comunidades. "No sabemos por qué nos hacen esto nuestros 'hermanos menores'", ha añadido.
Acción Contra el Hambre ha criticado al Estado colombiano por no respetar los tratados internacionales que defienden las tierras y las formas de vida de los indígenas. Además, han llegado a contabilizar 250 'falsos positivos' pertenecientes a miembros de estas tribus. Se trata de indígenas muertos en los combates entre los distintos grupos armados que el Ejército de Colombia disfrazó de guerrilleros.
Fuente: europapress.es