Revista Cocina
Hoy el artículo va sobre el aceite de coco. Un aceite que cada vez está más de moda, tanto en la cocina como para el cuidado de nuestro cuerpo.
El aceite de coco también recibe el nombre de manteca de coco.
Su uso está muy extendido en países tropicales, pero cada vez más se ha hecho extensivo a Estados Unidos y Europa.
En Malasia, Tailandia y Filipinas se utiliza tanto culináriamente como en uso terapéutico.
En Australia se consume de forma considerable y también es un gran productor.
La forma de obtener este aceite, determina sus propiedades más óptimas. Existen dos métodos:
- Se puede obtener del coco fresco (coco joven) y se conoce con el nombre de aceite de coco virgen, sin refinado. Se extrae como todos los aceites extra vírgenes por prensado en frío, con procedimientos naturales o mecánicos.
- Del coco seco se extrae el aceite de coco refinado que está blanqueado y desodorizado, y se obtiene mediante una reacción química.
De forma natural lo puedes encontrar en diferentes estados dependiendo de la temperatura. En verano y cuando la temperatura es superior a los 24 grados se encuentra en estado líquido; en invierno o por debajo de los 24 grados está en estado sólido, como el de la mantequilla.
Posee un sabor dulce que puede recordar al de las almendras y aporta como todas las grasas 9 calorías por gramo.
Contenido
Posee ácidos grasos (un 90% son saturados) de cadena media como el ácido caprílico, el ácido láurico (59%; en la leche materna también está presente) y el cáprico, vitamina K y E.
Al ser una grasa de origen vegetal, no contiene colesterol.
Debido a su alto porcentaje en contenido de ácidos grasos de cadena media, su oxidación se produce de forma más lenta que otros aceites vegetales.
Propiedades
- Puede ayudar a acelerar el metabolismo de las grasas, ya que pasa directamente al hígado donde se transforma en energía y no en grasa.
- Puede ayudar a disminuir la grasa abdominal.
- Poder antioxidante por su contenido en vitamina E.
- Refuerza el sistema inmune por su contenido en ácido láurico, por ser antivírico y antibacteriano.
- Ayuda a combatir la Helicobacter pylori.
- Se utiliza en cándidas.
- Reduce el colesterol total, aumenta el colesterol bueno o HDL y evita que el colesterol malo o LDL se convierta en una forma dañina, por sus ácidos de cadena media.
- Mejora la digestión y la función de la glándula tiroides.
- En estudios in vitro, en humanos los estudios son escasos, se ha visto que puede atenuar los daños cognitivos asociados al envejecimiento y a las enfermedades neurodegenerativas.
- Se trata de un buen lubricante que no reseca ni altera la flora.
- Protege, nutre e hidrata la piel y el cabello.
- Aumenta la fuerza y la elasticidad de la piel.
- No tienen un efecto blanqueante, si no que que es antibacteriano dental.
Evitar el aceite de coco hidrogenado porque se transforma en el organismo en una grasa trans y es muy perjudicial como todas las grasas de este tipo.
Los estudios que se han realizado con aceite de coco para confirmar sus efectos indeseables se realizaron con aceite de coco hidrogenado y después fueron extrapolados al aceite virgen extra, por lo que son erróneos.
Usos culinarios y cosméticos
El aceite de coco se utiliza en la cocina, en cosmética y como complemento nutricional.
En la cocina
- En la cocina se utiliza para aderezar platos y como aglutinante en bizcochos.
- Es un aceite vegetal que aguanta altas temperaturas de cocinado (hasta 180º sin humear) antes de que llegue a la oxidación.
- Tiene un papel relevante cuando se preparan currys y cada vez es más utilizado en la preparación de postres.
El aceite de coco virgen extra es el más indicado para utilizar en la cocina porque no ha sufrido ningún tipo de ultraprocesado, es puro.
En cosmética
- Se utiliza para la hidratación de labios, solo o en fórmulas.
- Sirve como desmaquillante.
En cosmética se podría utilizar el refinado ya que su precio es más económico y posee las mismas propiedades. Debido al proceso que sufre podrás comprobar que no desprende su olor y sabor característico.
Receta de exfoliante: un poco de aceite de coco con sal marina.
Se recomienda un consumo medio de 30-40 ml al día, que son de 1-2 cucharadas al día.
Gracias por leerme ...