En los ambientes, se lo utiliza como un efectivo repelente de insectos. Siendo tan bueno incluso, como la conocida Citronela pero de un aroma más fresco y agradable. Sus propiedades tonificantes del sistema circulatorio, hacen de este Aceite Esencial un elemento ideal para el tratamiento de arañitas, piernas cansadas, retención de líquidos o celulitis. En este caso, recomendamos vehiculizarlo en una crema y realizar suaves masajes en la zona. En cuanto al cuidado de la piel, el Aceite Esencial de Limón es blanqueador, empleado para el tratamiento de manchas de todo tipo. También posee propiedades astringentes, por lo cual suele estar incluido en las fórmulas de cremas de limpieza, para combatir el acné, las espinillas o los granos. En estos casos, recomendamos combinarlo con el Aceite Esencial de Árbol de Té, o también conocido como Tea Tree. Revitaliza la piel, de la misma manera que nos revitaliza cuando disfrutamos de su aroma, y por ello es empleado en cremas antiarrugas. Desde lo energético, el Aceite Esencial de Limón es recomendado para aquellas personas que generalmente toman distancia de los demás, quienes se mantienen tranquilos y apacibles, pero que suelen sentirse tristes a causa de su soledad. Limpiador de ambientes: aleja la carga negativa en lugares muy concurridos, donde hubo discusiones o tensión, preparando los ambientes donde se va a meditar, practicar yoga o realizar masajes. Sin duda es excelente para combinar para estos fines, con el Aceite Esencial de Sándalo. El Aceite Esencial de Limón, es uno de los más usados en hornillo, por su aroma fresco y agradable, y por su capacidad para combinarse de manera fabulosa con otros Aceites Esenciales. Fuente: Ayurveda Tibetana
El Aceite Esencial de Limón, perteneciente al grupo de los cítricos, se obtiene de la cáscara del fruto y no de su interior o jugo como se podría creer. Es rico en vitaminas, y posee la propiedad de aumentar la producción de glóbulos blancos, responsables de defender al cuerpo contra las infecciones. Por lo cual, podemos emplearlo en combinaciones tendientes a fortalecer nuestro sistema inmunológico, sobre todo en Otoño o cuando atravesamos situaciones de mucho nerviosismo o stress.
Ayuda a conseguir un equilibrio entre las necesidades materiales y espirituales. Sobre todo para quienes trabajan en el ámbito de las terapias naturales y energéticas, en donde lo material no es importante, pero sin olvidar que el dinero también es necesario para poder seguir con el trabajo.
Al fin y al cabo los gastos deben pagarse, tenemos que vivir y comer bien, y para quienes trascienden a un plano muy espiritual, a veces es difícil lograr este equilibrio, en donde no se sientan “materialistas” pero a su vez puedan formar parte del sistema comercial.