Tras recopilar la información de casi un centenar de productos con la aceituna verde como protagonista, he decidido dosificar en dos publicaciones los resultados de la comparativa. En esta primera entrega me ocuparé de las aceitunas sin añadidos y también de las aliñadas. En unos días publicaré la segunda entrega dedicada a las aceitunas rellenas y a las aceitunas con sabores.
De entrada te diré que, en esto de las aceitunas, todo depende de cómo te gusten. Si te conformas con una oliva sencilla (con hueso o sin él), tienes bastante en donde elegir. Ahora bien, si buscas productos con aliños, con rellenos o con sabores, la cosa se complica. Vamos a verlo.
Aceitunas sencillas
Si bien no he encontrado ninguna marca libre de aditivos, no hay que preocuparse porque la mayoría son de color verde (inocuos para la salud). Eso no quita que, como siempre, mi recomendación es elegir aquellas que contienen el menor número posible de "añadidos". De otro lado, las personas sensibles a los sulfitos deben de tener mucho cuidado ya que hay algunas marcas que contienen restos de dicha sustancia.
Aceitunas aliñadas
Aquí la cosa ya varía. Aunque existen unas cuantas marcas que son aceptables, la mayoría de ellas contiene aditivos no recomendables como potenciadores del sabor o aditivos más agresivos. Ojo también con los sulfitos.
Un consejo que es aplicable a todas las variedades de aceitunas (con o sin aliños, con sabores o rellenas) es que hay que fijarse bien en el peso neto escurrido, no en el tamaño del envase. Esto es así porque, en muchos casos, el ingrediente principal que estamos comprando es agua. Al añadir mucho líquido, el envase es más voluminoso y parece que contiene más aceitunas, cuando no siempre es así.
Conclusión
Yo suelo consumir las aceitunas más sencillas porque son las que, por regla general, contienen menos aditivos. De todas formas, si te gustan las aliñadas, también existen unas cuantas opciones sin "añadidos" desaconsejables.
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