No es el primer caso de acoso escolar
que ocurre en España—bullying lo llaman los posmodernos trasnochados—. Ya saben, todo lo foráneo suena guay. De hecho, ya ha fallecido alguno en lo que va de año. Es terrorífico, que un chaval se quite la vida debido a la violencia escolar. ¿Hasta cuándo? No me sorprende que en la sociedad haya abuso de poder. Desde los orígenes de los tiempos ha existido que alguien someta a alguien. Siempre ha habido un abusón en el colegio y, desgraciadamente, siempre lo habrá. No creo que se erradique con cuatro leyes.Pero sí hay dos factores que me llaman poderosamente la atención. Por un lado, la baja tolerancia al fracaso, al sufrimiento, que tiene la sociedad actual. Estamos convirtiendo a nuestros hijos en auténticos memos que no sabrán enfrentarse el día de mañana a un jefe injusto —que por desgracia, también pueden tener—. Y por otro lado, la crueldad de los tratos vejatorios de los jóvenes hacia sus compañeros. Es espeluznante que a esas edades sean tan sádicos con sus compañeros. Parece que los jóvenes no tienen conciencia del dolor que afligen. Lo triste es que me temo que en ambos casos los culpables somos usted y yo. Los padres que estamos convirtiendo a nuestros hijos en unos déspotas insoportables. Eso sí, con todos los caprichos a su alcance.
Piensen.
Sean buenos.Permítanme que la canción regalo de hoy la elija yo. Es Se equivocaban contigo. Todos decían que volvería desencantada. Todos decían que tú decías. Se divertían un rato, hasta pasarse de tragos... Con todos ustedes: ¡Quique González!
https://www.youtube.com/watch?v=A5Qavplvm2I