Nos acaba de dejar Richard Todd. Es uno de los muchos ejemplos de actor-soldado tan frecuentes en el cine de los 50 y 60.
Como soldado participó en la Operación Tonga durante el desembarco de Normandía. Su unidad llegó como refuerzos al grupo que había tomado el puente Pegasus. Allí combatió bajo el mando del Major John Howard, al cual daría vida en la película "El día más largo".
Después de la guerra volvió a su oficio de actor. En 1955 interpretó su papel más famoso: el comandante Guy Gibson en "The Dam Busters". Pero lo más curiosos es que la celebridad llamó a su puerta y no pudo aprovecharla. Ian Fleming le seleccionó para interpretar a James Bond en la película "Dr. No". Sin embargo estaba comprometido con otro rodaje y el papel fue a parar a un actor escocés desconocido llamado Sean Connery. Tras el éxito, Todd intentó protagonizar otro film basado en las obras de Fleming pero sin éxito.
Y ya de paso, aprovecho para hacer un pequeño homenaje a otro actor que se nos ha ido, aunque este es conocido por otro género totalmente distinto. Paul Naschy, el mejor representante del terror spanish style. Al parecer tiene el record de ser el único actor que ha interpretado a los siguientes iconos: Drácula, el Hombre-Lobo, Frankestein, Fu Manchú y la Momia.
Descansen en paz