Adecuación Curricular: Oportunidad a la educación

Cada ser humano percibe el mundo de manera única y particular; aprende  a vivir en sociedad bajos definiciones y preceptos ya establecidos, y con el paso de los años la misma sociedad encasilla el concepto de sujeto ideal, de tal manera que marca las pautas del comportamiento. Pero qué sucede cuando una persona no encaja socialmente en un grupo, cuando sus procesos cognitivos no son claramente idénticos al de los demás.

Visto desde las aulas, se ha discriminado a la persona con dificultades de aprendizaje, excluyéndose del sistema, sin considerar que existen ritmos mentales diferentes y sistemas específicos de recepción de la información muy particulares de cada individuo, de allí que la frustración educativa en muchos de los casos se debe a una inapropiada e indetectable atención de las formas en que cada individuo procesa la información que los docentes requieren transmitir.

El sistema educativo actual ha puesto a disposición las Adecuaciones Curriculares, como respuesta a las exigencias educativas especiales. Pero ¿qué pasa en el salón de clase con estudiantes y sus evidentes problemas de aprendizaje, diagnosticados por especialistas o bien detectados por los mismos docentes? La realidad es que estos estudiantes en muchos casos siguen siendo víctimas de una estadística al convertirse en una carga laboral para el docente o simplemente adoptan la adecuación curricular sin un ajuste adecuado.

Desde una perspectiva profesional, se observa que los tutores en las aulas miran a través de un enfoque erróneo a los estudiantes con adecuación, no entienden el funcionamiento de cada individuo y más allá oscurecen el panorama de superación académica y emocional, papel desempeñado por padres de familia, especialistas, y más importante aún por los mismos docentes.

Algún docente estará pensando: “no es tan fácil enseñar cuando el aula tiene 35 estudiantes o más, y hay estudiantes con dificultades que retrasan la enseñanza a los demás” Y la realidad es que el docente encontrará Déficit Atencional, Asperger, dislexia, problemas de lenguaje, entre otros; y él es el único capaz de adentrarse y mejorar la calidad de vida en estos niños y jóvenes a través de la educación como medio de movilidad social.

Pero ¿por qué es difícil en algunos casos aplicar las Adecuaciones Curriculares? Hay dos posibles respuestas, la primera es la mala relación teoría-práctica, la ausencia de un buen conocimiento de parte de los docentes y una práctica poco planificada de parte de las instituciones; la segunda es la poca sensibilidad de parte de los docentes, pues miran a los estudiantes  como una imposición de parte de las instituciones, educarles se ha convertido en una carga emocional que genera estrés, tensión y tiempo extra que no creen sea justo deban aplicar. Parece ser que los docentes han olvidado que trabajan con materia prima totalmente moldeable. No consiste en impartir contenidos de acuerdo a una planificación, sino en cómo lograrlo significativamente, respetando individualidades, y que la motivación hacia el estudio, lejos de ser un reto inalcanzable se convierta en la satisfacción que destaque a los docentes por vocación.

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