Revista Opinión
Hoy voy a jugar a ser adivino, pero ya lo advierto de antemano, en este caso es demasiado fácil.
Esta tarde se sortean los equipos de la próxima Champions y, como siempre, los encargados de sacar las papeletas de los bombos para los emparejamiento son: sí, señores, lo han adivinado también todos ustedes: los jugadores del Real Madrid.
¿por qué? Porque siempre es así, es como si el RM hiciera una especie de bravata más, un nuevo brindis al sol: sí, señores, sí, otra vez más vamos a sacar de los distintos bombos no sólo los equipos que más convengan al RM sino también, claro está, los que más perjudiquen al Barça, B, porque, si no, la fiesta no estaría completa.
Tomen nota, señores, por favor:
1) al Madrid le tocarán: el Sakhtar o el Zenit porque yo, así, a bote pronto, no sé realmente cuál es peor, una cosa es segura, el que le toque es el que ellos considerarán peor; el Galatasaray, que ya le tocó en el sorteo anterior, es igual, ellos, los del RM, no tienen ninguna clase de complejos y, por último, el Malmoe;
2) al Barça, también le tocará este año, otro repetido el Manchester City, después, el Liverpool y, al final, la Roma.