Después del momento de reflexión llevado a cabo con el artículo “¡Adolescentes qué horror! No tiene por qué ser así” he recibido mensajes preguntando qué pueden hacer para mejorar la relación en casa. Ese tipo de preguntas que sustituyen a las del tipo ¿qué hago con mi hijo adolescente para no salir loco? ¿cómo sobrevivir a la adolescencia? … hacen que el objetivo de mi anterior artículo lo haya alcanzado, sintiéndome bastante orgullosa. ¡¡Gracias!! Tengamos en cuenta el poder de las palabras…
¡Adolescencia que horror! No tiene por qué ser así
10 apuntes para mejorar nuestra relación:
1.Amor incondicional:
Recuérdale que estás ahí, demuestra que puede confiar en ti, que puede contar contigo cuando lo necesite.
2.No pretendas saberlo todo ni mucho menos controlarlo:
Mantente interesado sin enjuiciar, sin pretender saberlo todo, es su vida. Demasiado control puede llevarte a un mayor distanciamiento o crearle inseguridades.
3.Empatía:
Aquí normalmente encontramos dificultades. Una manera fácil de ver por qué vienen es plantearnos por ejemplo esta situación: si tu amiga te cuenta una experiencia en la que tú consideras que se ha equivocado, ¿le contestas con sermones y broncas? No creo…
Por esto encontramos dificultades, porque en vez de hacerles sentir comprendidos y mostrar empatía contestamos con sermones, broncas o intentando manipularlos.
Planteo otra situación: si tu jefe te manda un trabajo para hoy y se te olvida hacerlo, ¿quieres que te grite (peor aún delante de alguien porque te sientes más humillado)? ¿quieres que te etiquete como gandul? Imagino que prefieres que te escuche…y, por supuesto, esto no es una excusa para no asumir las consecuencias de tus responsabilidades, para no reparar, en este caso para no encargarte y hacer el trabajo lo antes posible.
La empatía refuerza el vínculo y de éste último, depende en gran parte el éxito. Se requiere aceptación y comprensión. El simple hecho de sentirte escuchado con atención ya ayuda y es un hondo consuelo.
4.Ser modelos:
Ser modelo en cualquier aspecto, plantearte qué cosas te gustaría que hiciera tu hija, cómo te gustaría ver a tu hijo,…y practicarlas en primera persona.
“EL EJEMPLO TIENE MÁS FUERZA QUE LAS REGLAS” Nikolái V. Gógol
En este punto es importante enseñarle a comunicarse, practicando la asertividad en casa como modelo de comunicación respetuosa. Hablar sin sermonear, sin juicios, sin manipulaciones, sin pasividad ni agresividad.
Adolescentes: despues de la ESO… ¿Que hago?
5.No te vayas a los extremos
Autoritarismo y sobreprotección son dos polos opuestos que pueden tener consecuencias nefastas. El autoritarismo provoca miedo, hostilidad y rechazo, lo que lleva aún más a buscar la aceptación entre los iguales, y la sobreprotección genera más inseguridades, que en muchas ocasiones el riesgo aún es mayor por la necesidad de popularidad, de reafirmar; entre otras.
Puede que sus contestaciones desmesuradas o sus comportamientos inadecuados vengan empujados por una falta de afecto, por gritos, por ausencia de normas,.. y, esa baja autoestima, ese miedo, esas inseguridades, puedan provocar una mayor sensibilidad, un perfeccionismo para poder demostrar así lo valioso que soy, una frialdad para protegerse ya que consideran que si nadie se les acerca no le podrán hacer daño,…
Aquí es importante valorar cómo se ha vivido en casa y cómo se vive gestionando posibles resentimientos, intentar leer entre líneas para entender lo que no se ve, para comprender no solo lo que dicen si no también lo que quieren decir, para conocer las necesidades encubiertas que le empujan de una u otra manera.
6.Ya no somos sus referentes
Esa mamá perfecta y/o ese papá idílico han dejado de existir para dar paso a su grupo de amigos. Esto no significa que no nos necesiten ni que dejemos de mostrarles nuestro amor incondicional. Tampoco quiere decir que intentemos ser su amigo/a, ¡NO es una buena idea, los dejamos huérfanos! amigos pueden tener muchos, madre y padre solo uno. Tampoco lo es, querer serlo entre su grupo de iguales.
Además de los amigos y familiares, también hay una influencia mediática. Su indumentaria, su estilo musical, sus hobbies, sus juegos,… actúan como vínculo de unión y les ayuda a responderse a la pregunta “¿quién soy?”, cuanto más los juzgamos más incomprendidos y más reservados se muestran.
7.Normas y límites
Podemos ir acompañando con reglas claras centradas en los aspectos primordiales e ir aumentando el diálogo y las negociaciones, dejando cada vez más libertad y ejerciendo menos control, siendo acorde por supuesto a como ellos van contestando y a lo que van realizando, por ejemplo, a la hora de pactar horarios, fijar tareas,…
Responsabilidades en niños, niñas y adolescentes
8.Etiquetas fuera, mejor para la ropa
Describir las situaciones dando información sin juicios, sin evaluar, sin atacar a la persona.
Si ya cuentan con etiquetas, intenta mostrarle situaciones en las que pueda desmontarlas, librarse de los encasillamientos y verse de otra manera. Enseñar cómo rectificar, dar opciones y alentar a que proponga una tormenta de ideas para la resolución de conflictos en vez de buscar culpables y dilatar los problemas.
9.Clima de confianza
Es importante contar con un clima de confianza, que normalmente cuesta conseguir, debido a lo que he comentado antes, debido a que cuando nos cuentan algo, en vez de acompañarlos y mostrar empatía, contestamos con sermones, los juzgamos o intentamos manipularos.
Podemos dejar a un lado conversaciones superfluas y contar con un momento de reflexión sobre multitud de aspectos: conductas adictivas, drogas, ocio saludable, relación familiar, conductas delictivas, embarazos no deseados y transmisión de enfermedades, la sexualidad ya que un desajuste afecta emocionalmente, educación animando a la constancia, al esfuerzo, encontrando una motivación e interés que le ayude a la desaparición de la desgana, de la pereza,…
Crear conversaciones donde lo primordial sería escuchar atentamente sus opiniones antes de dar la nuestra.
10.Inteligencia emocional
Trabajar la inteligencia emocional es clave para nuestra salud física y mental, es la mejor prevención.
Conocer cómo se habla así mismo, sus pensamientos, su autoestima y qué hace para cuidarse. La gestión emocional, las habilidades sociales, lo que significa para él o para ella la amistad planteándose qué amigo o amiga quiere ser y qué clase de amigos tener,…
“La evidencia es indiscutible: las conversaciones contigo mismo influyen directamente en tu competencia para alcanzar lo que te propones. Anónimo”
Temas muy importantes como la asertividad para ofrecerme libertad sin ser agresivo, la proactividad para convertirme en el protagonista de mi vida y no ser un mero espectador,…
Hallar un equilibrio y encontrar una paz interior que no venga por la ausencia de los problemas, sino a pesar de ellos.
En definitiva, llenarme de herramientas de bienestar emocional.
Para terminar, quiero recalcar la importancia de no perder la oportunidad de acompañar y enseñar. Seamos conscientes de que este período es un gran momento para aprender, es una etapa de experimentación que se acaba y no vuelve.
“El cerebro es muy adaptable y maleable”