Hemos aprendido que adorar es más que cantar, adorar es agachar la cabeza y rendirnos de manera sacrificial delante de Dios en obediencia, pero ¿cuál es el propósito por el cual adoramos? la adoración, como todo lo que hacemos, tiene un propósito que es por Dios y para Dios, ¿qué esta buscando formar el Padre Celestial en nosotros? Vamos a hablar del propósito eterno de Dios, del misterio de Dios, de su gran plan de las edades.
Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren.
Juan 4:24
800 – Adoración Profunda | #2 El propósito de la adoración