Hace cuatro años, AERGI inció su andadura con el convencimiento de que trabajando de una manera abierta y estructurada se podría llegar a conseguir una mayor visibilización de la enfermedad adictiva y con ella la deseada normalización que hoy por hoy se halla tan esquiva de conseguir.
Un objetivo que a pequeños pasos van consiguiendo. En 2015 fueron atendidas 165 personas, enfermos y familiares, y se han realizado 483 sesiones de terapia con 8.060 asistencias, 1.287 más que el año anterior. Además de 24 terapias de familia, con una asistencia de 485 personas. Unos datos a los que también hay sumar también las 12 terapias informativas abiertas al público con 622 asistencias, impartidas por Josean Fernández, y que suelen contar ocasionalmente con la participación de profesionales de la psiquiatría y la medicina como la Dra. Elizabeth Lazpiur, la enfermera de psiquiatría, Mertxe Arsuaga, y el Dr. Javier Herranz, entre otros.
Unas terapias realmente eficaces, ya que el 98% de los usuarios de Aergi están sin consumir y el 99% acude a terapia habitualmente. La edad media de los enfermos es de 46 años, mayoritariamente con un nivel de formación medio, y siendo significativo el número de mujeres en terapia, ligeramente superior al de los hombres.
Evolución positiva
La evolución de la Asociación ha sido importante cualitativa y cuantitativamente hablando, tanto en cuanto a su crecimiento exponencial como a la oferta terapéutica que proporciona, ya que sus dirigentes, desde el inicio, optaron por adquirir una preparación técnica que les avalara ante la comunidad profesional.
Se pasó de un modelo de trabajo basado únicamente en la experiencia, a un modelo metodológico y estructurado, fundamentado en la preparación como técnicos en drogodependencias de Yolanda Anguera y Josean Fernández, que sumado a dicha experiencia, a la que nunca han renunciado, ha dotado a las terapias de AERGI de un sistema único en la rehabilitación de las adicciones. Un modelo que se ha asentado con la conclusión de un Máster en Tratamiento y Prevención de Conductas Adictivas y Drogodependencias por parte de ambos, incrementando así la calidad de la asistencia y la metodología aplicada a las sesiones.
Una labor de rehabilitación que se ha venido realizando desde hace tres años y medio, ofreciendo ayuda a 401 enfermos y a 154 familiares, y dando a la enfermedad adictiva la categoría que le corresponde, por su gravedad y comorbilidad.
Además, Aergi ha diseñado a lo largo de este último año un Plan de Prevención de Adicciones dirigido a colegios e institutos de Gipuzkoa. Un proceso con la particularidad de que los propios estudiantes realizan el seguimiento de una persona adicta, teniendo un contacto directo con ella. De este modo, los estudiantes se convierten en aliciente de rehabilitación y se implican en la reconstrucción de la vida de una persona.
Asimismo, Aergi, está implicada en el Plan de colaboración de la OSI Donostia con Asociaciones de enfermos y participa en actos sociales de toda índole. Se ha convertido en el grupo de mutua ayuda para el tratamiento de las adicciones (de todas las adicciones) tanto químicas como conductuales, y con mayor futuro de nuestro territorio.
Los grupos humanos un instrumento fundamental
Un trabajo que está dirigido a complementar los tratamientos médico-psiquiátricos y la información y prevención de las adicciones. La metodología de trabajo es la de la Terapia Social de los Grupos de Mutua Ayuda, asentada en la regeneración neurológica mediante el desarrollo de la atención, el control de impulsos y el conocimiento y contención de los resortes de activación del craving. Un trabajo sistemático impulsado y dirigido por nuestros Masters en Tratamiento y Prevención de Conductas Adictivas y Drogodependencias.
Aergi no tiene nada que ver con la imagen estereotipada que la sociedad tiene de los grupos de terapia. Incide en dos aspectos fundamentales que fomentan el inicio del tratamiento y el posterior éxito del mismo: que el usuario adquiera un nivel de motivación adecuado y que disponga de apoyo sociofamiliar a lo largo del mismo.
La asociación, convierte en un instrumento fundamental el papel de los grupos humanos como sistema social en las conductas de salud y enfermedad, para la promoción, la prevención, el tratamiento, la recuperación y la intervención en múltiples ámbitos de la salud psicosocial, así como en los procesos de interación e integración de los usuarios en los programas y unidades asistenciales sociosanitarias.
Aergi contribuye a hacer consciente al enfermo adicto de que la rehabilitación es una escalada que no se puede hacer con las manos en los bolsillos. Además, la Asociación pretende establecer contactos permanentes con los profesionales que atienden a sus usuarios mediante informes de evolución, al entender que eso, junto con el apoyo familiar puede constituir un trípode inamovible del proceso de rehabilitación.
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