Agencia Tributaria, cierre de Delegaciones

La Agencia Tributaria cierra Delegaciones

Agencia Tributaria

¿un lavado de imagen?

Recientemente y alegando motivos de austeridad, la Agencia Tributaria ha anunciado el cierre de 12 Delegaciones. No dice nada de despidos y es de suponer que no afectará a ningún funcionario, salvo por posibles reubicaciones de tareas. Se echa en falta en la comunicación que se diga únicamente eso, que se cierran 12 delegaciones por motivos de austeridad, pero no se comente nada del supuesto ahorro económico que ello conlleva. ¿O es que no hay ahorro económico?

Algunos detalles sobre estos cierres de Delegaciones de la Agencia Tributaria

1. Se suprimen 12 Delegaciones territoriales situadas en las provincias donde tienen su sede las correspondientes delegaciones especiales de la Agencia Tributaria, quienes asumirán las tareas de las que se eliminan.
2. También se han eliminado las administraciones de Aduanas y de Impuestos Especiales con un menor tráfico de mercancías, integrándose en los recintos aduaneros dependientes de la Agencia Tributaria regional: Palamós (Girona), San Carles de la Rápita (Tarragona), Ribadeo (Lugo), Gandía (Valencia) y Pasaia (Guipúzcoa)
3. Se ha reorganizado el área de Aduanas de Palma de Mallorca, Barcelona-marítima y Barcelona-carretera.

A priori, todo este tipo de cierres y reestructuraciones de la Agencia Tributaria me parecen bien y no está en mi ánimo criticarlas porque es evidente que sus estructuras están más que sobredimensionadas, pero sinceramente, no basta con hacerlo, sino que hay que evaluar el impacto económico que ello supone para que la medida pueda tener la trascendencia que se pretende. Recordemos que luego lo utilizaran en contra nuestra cuando nos echen en cara las grandes medidas (y sacrificios) que han tomado… ¿pero de qué habrán servido esas medidas? He ahí el quid de la cuestión, este tipo de medidas hay que cuantificarlas detalladamente.

Una vez evaluado el supuesto ahorro presupuestario gracias a esta concentración, deberían de seguir valorando la opción de reducir o concentrar otros departamentos que, con la actual crisis, andan muy cortos de trabajo.

Ramón Cerdá