No existe la familia perfecta ni familia sin secretos y eso es algo que todos hemos aprendido mirando a la nuestra. En cualquier familia del tipo que sea hay algunos rencores, espinitas que nunca acaban por sacarse y eso es lo que sucede con la familia Weston, que vuelve a reunirse en la pequeña ciudad de Pawhuska (Oklahoma) porque el padre de familia ha desaparecido.
Agosto es la adaptación de la obra de teatro del mismo nombre de Tracy Letts, ganadora del Pullitzer en el año 2008. Y si a eso le añadimos la participación de Meryl Streep interpretando el papel de Violet Weston -la problemática madre de familia, malvada, adicta a los calmantes y un poco desequilibrada-, el resultado es un excesivo elenco de nombres para una cinta que podría haber sido una modesta e íntima producción indie.
La desaparición de Beverly Weston (Sam Shepard) hará que su hija Barbara Weston (Julia Roberts), su marido Bill (Ewan McGregor) y su hija Jean tengan que atravesar medio país para llegar hasta la ciudad natal de Barbara en las llanuras, que ella definirá con un estado mental, una aflicción espiritual. Allí se encontrará con sus hermanas Ivy (Julianne Nicholson) y Karen (Juliette Lewis) y se reencontrará con una madre cada vez más fuera de sí por culpa de las pastillas que no dejará de echarle en cara que se marchara de Pawhuska para seguir con su vida y nunca mirar atrás.
John Wells ya se había puesto detrás de las cámaras en la interesante The Company Men además de en varios episodios televisivos de Shameless o Urgencias. Wells hace un más que correcto papel trasladando a la gran pantalla la obra de Letts, quien también se ha encargado de guionizar la obra.
Las actuaciones de todos los actores son excelentes, destacando sobre todo las de Meryl Streep, Julia Roberts y la breve aparición de Sam Shepard. Agosto, aunque de carácter dramático explota de vez en cuando su peculiar sentido del humor y nos hace reír a carcajadas para acto seguido tenernos muy serios mirando la pantalla. A destacar la brillante escena sin cortes de la cena familiar, donde Meryl Streep demostrará por qué algunos la consideran la mejor actriz viva.
Quizá el gran pero de esta película es ser demasiado teatral (pero cómo no), tener excesivas líneas argumentales que se cruzan aquí y allá dando al conjunto un resultado un poco caótico. Agosto es una más que aceptable adaptación envuelta del mejor elenco actoral posible y que nos adentra en la complejas redes familiares de la América rural.