Revista Infancia
Ir a lugares publicos con nuestros hijos es complicado porque su comportamiento no atiende a normas sociales,no tienen paciencia para aguantar situaciones de espera y/o silencio.A Natalia ademas le molesta el murmullo de la gente alrededor y no aguanta ni 5 minutos sentada...necesita moverse,actividad...y gritar,sobretodo gritar.Es como una niña pequeñita,se agobia y se tira al suelo,patalea,llora,intenta escaparse,molesta a las personas de alrededor porque no tiene cuidado y o bien se puede sentar encima de cualquiera como que puede encapricharse de algo de alguien e intentar quitarselo,etc...El otro dia fuimos a la policia a renovar DNI.Aunque fuimos con hora previa,siempre te hacen esperar un rato,por lo que a la que pude,avise a una de las chicas policia que habia en una mesa en cuanto vi que se quedaba libre un segundo,del autismo de Natalia para ver si podian pasarnos pronto. - Pues ahora mismo-me dijo ella con una sonrisa.
Tengo que agradecer el trato dado de la policia a mi hija,que no solo fue comprensiva con sus dificultades,sino que ademas se lo tomó todo como un juego con ella...le tomo las huellas hasta al Pato Donald de Natalia que siempre lleva a todas partes y guiandole la mano,hizo hasta que el peluche firmara,jajaja.... cuando firmó Natalia soltó un "wow" exagerado y avisó a su compañero de al lado diciendole en alto "a que es la mejor firma que has visto?" y los dos aplaudieron a Natalia.He de decir que Natalia estaba encantada con el show y se portó genial y hasta disfrutó.
Realmente,la empatia hacia nuestros hijos es un bien tan escaso que cuando la encontramos,lo minimo es agradecerla y desear que cunda el ejemplo.Son pocas las veces que la encontramos y a medida que crece Natalia,menos...pues a mucha gente le choca ver a una niña tan grande comportandose como una cria pequeña.Yo solo espero que poco apoco la sociedad vaya siendo mas tolerante...aunque la realidad es que nos queda todavía mucho camino para hacerla realidad.