Bogotá, 17 ene (PL) Los periodistas colombianos Roberto Romero y Yila Aguilera fueron atacados por oficiales del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD), mientras reportaban el desalojo de un predio en el norteño departamento de Santander.Los agentes policiales, además de causarles heridas, les borraron la información registrada.
El hecho, denunciado por la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) en un comunicado, ocurrió el pasado miércoles en el municipio de San Pedro, donde el desalojo provocó un enfrentamiento entre los miembros de la comunidad y el ESMAD.
En medio de los disturbios, Romero, reportero del Meridiano de Sucre, y Aguilera (su esposa), corresponsal de un programa de televisión regional, se identificaron como periodistas, a lo cual los miembros del Escuadrón respondieron: "perros, aquí no valen periodistas ni nada", y continuaron agrediéndoles.
Nos pegaron en la espalda, el abdomen y el rostro, testimonió a la FLIP Romero, quien narró que su esposa perdió el conocimiento a raíz de los gases lacrimógenos que les lanzaron.
Según explicaron ambos, cuando se acercaron a la estación de policía de San Pedro para hacer la denuncia, fueron agredidos verbalmente y solo tras reiterada insistencia les devolvieron la cámara de video y los celulares, después que los agentes del ESMAD borraron la información acopiada.
La FLIP calificó de grave los hechos, tras subrayar que la eliminación de información implica una forma de censura previa, vulnera la reserva de las fuentes periodísticas y puede constituir falta disciplinaria, así como delitos de sabotaje y violación de la libertad de trabajo, consagrados en los artículos 198 y 199 del Código Penal.
Es inadmisible, precisa el texto, que estos abusos de la fuerza pública persistan después de la situación vivida en el país durante las protestas sociales de 2013.
En 2012 se registraron 158 agresiones contra periodistas en Colombia, la cifra más alta de los últimos cuatro años hasta esa fecha, según datos de la FLIP.
Durante una intervención el 14 de mayo de 2013, en un foro nacional sobre el tema, el presidente Juan Manuel Santos aseguró "las autoridades están brindando protección especial a 90 periodistas" y añadió que se aplicarían las mismas medidas con todos aquellos que lo requirieran.
La libertad de prensa está bajo permanente amenaza en Colombia y el periodismo que investiga, denuncia y defiende el interés público es un oficio riesgoso, manifestó en uno de sus artículos la columnista del diario El espectador, María Elvira Samper.