Revista Economía

Aguanta amiga

Por Ms

Hoy escribo una entrada muy especial, y es un escrito que espero le sirva de abrazo a una de las chicas que comparte su experiencia sobre el TDPM en el foro de facebook.

Este foro ha sido para muchas de nosotras que padecemos este trastorno tan desagradable, un descubrimiento total. En él comentamos cómo nos sentimos en el día a día, cómo evoluciona nuestra sintomatología y se proporcionan recursos y sobre todo mucho amor para esos días tan duros.

Hoy le ha tocado a una de ellas, una tia muy valiente y luchadora, que día a día combate los efectos de este trastorno, pero que en ciertos momentos se le hace casi inaguantable.

Hace unos meses, mi mejor amiga creó una cajita para mi, con frases de cariño, recuerdos y en general una fuente de amor para que en momentos de desesperación, acudiese a ella y recordase por qué tenemos que seguir luchando…

Amiga, hoy te escribo este artículo para que te sirva de cajita a ti:

  • Primero recuerda que no estás sola. Y que los pensamientos de soledad que hoy te abruman, al cabo de los días se irán. Recuerda que tienes familia, amistades y hasta un grupo de mujeres que te apoyan y te quieren aún sin haberte visto en persona.
  • Esto que sientes no te pasa solo a ti. Muchas de nosotras pasamos por lo mismo y aunque los grados de intensidad varían, desgraciadamente es algo más común de lo que debería…
  • Aunque la nube sea muy negra, y el sol quede muy lejos, SABES porque siempre pasa, que volverá a salir. Puede que a veces tarde más y otras menos, pero siempre lo hace
    😉
  • En momentos tan malos, solo queda tener paciencia, cuidarte a ti misma, y centrarte en aquellas cosas buenas que la vida te ha dado. Porque aunque ahora todo sea gris y creas que no tienes nada, te digo unas cuantas cosas que tienes sin conocerte: tienes una niña preciosa, tienes una sonrisa que ilumina; tienes un cuerpo que te trae y te lleva (mucha gente no puede desgraciadamente); tienes un grupo que te apoya (en el pasado hubiesen dicho que estás loca); y tienes una vida por delante.
  • Eso sí… cuando la tormenta pase, recuerda que siempre tenemos que seguir investigando, aplicando nuevos cambios para mejorar un poquito los síntomas y que así, la tormenta cada vez sea más leve.

Un abrazo, te queremos.


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