“Venezuela está lista para un diálogo en base al respeto y a los términos de igualdad entre los Estados con el Gobierno del presidente Barack Obama donde quiera, cuando quiera y como quiera, así lo digo como presidente de la República Bolivariana de Venezuela, estamos listos”, afirmó Maduro.
El mandatario venezolano hizo estas declaraciones durante un acto que encabezó en una zona humilde del oeste de Caracas para celebrar los 21 años de la liberación de Hugo Chávez de la cárcel en la que permaneció dos años después de liderar un golpe de Estado fallido contra el entonces presidente, Carlos Andrés Pérez, en 1992.
“Si el presidente Obama quiere apretar esta mano, de un venezolano, un patriota hijo de Bolívar, hijo de Chávez, estoy listo, listo para apretar su mano, para hablar mirándole a los ojos en términos de igualdad“, agregó Maduro.
El gobernante venezolano dijo el miércoles que durante la VII Cumbre de las Américas que se celebrará en abril en Panamá hablará con Obama para decirle que en Miami funciona un “centro de conspiración económica” desde donde se “ataca” la moneda y el comercio del país sudamericano.
Maduro, además, dijo la semana pasada que en el marco de esta cumbre le dirá a Obama que derogue el decreto que aprobó a principios de mes en el que declaró una “emergencia nacional” por la “amenaza inusual y extraordinaria” que consideró que representa Venezuela para Estados Unidos.
Esta solicitud la hará, agregó entonces Maduro, contando con el respaldo de 10 millones de firmas que su Gobierno se ha propuesto recoger para hacer la exigencia al presidente estadounidense.
Hoy, Maduro celebró que su campaña por las firmas ya sumaba cuatro millones de rúbricas tras manifestar su agradecimiento a la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) que esta jornada expresó su “rechazo al decreto” y llamó a los Gobiernos de EE.UU. y de Venezuela a que “inicien un diálogo”.
Venezuela y Estados Unidos mantienen actualmente sus relaciones en uno de sus puntos más bajos desde que en 2010 se quedaron sin embajadores.
Días atrás, Maduro se se dirigió a Washington en inglés:
Desde su llegada al poder en 2013, Maduro ha acusado a Estados Unidos de involucrarse en asuntos venezolanos y participar en un plan para derrocarlo.