Dicen que la publicidad ha de seguir las tendencias y ya nos estaban faltando anuncios handmade… ¡Pero Airbnb le ha puesto solución! Bueno, más bien TBWA Singapur que es la autora de este spot. Han necesitado 30 personas, 5 semanas y 2400 horas de trabajo, pero oye, ha merecido la pena… Bueno, ha merecido la pena y ¡¡¡¡por la madre del cordero, vaya presupuesto tienen los clientes por ahí abajo, válgame Zeus!!!!
Encima, el spot se ha rodado en plano secuencia, es decir, todo del tirón, así que, cualquier cosita de movimiento que se vea, está hecha MECÁNICAMENTE. Sí, sí, MECÁNICAMENTE. Ni postpro, ni leche y habas. Que sólo les ha faltado utilizar energía solar para cargar el trenecito donde iba la cámara y así darle a la electrónica con un palmo en las narices.
La idea de la marca es reflejar ese minimundo propio que se nos crea cuando viajamos. Para ello sólo necesitó crear un set de 85 metros cuadrados en el que quisieron darle mucho protagonismo a los paisajes y a las personas, para asociarlas con Airbnb. Tanto es así, que alguno de los muñequillos que aparecen en el vídeo, ¡son clones de los usuarios reales que ofrecen sus casas a turistas a través de esta plataforma! Aunque todos sabemos que, independientemente de las intenciones y los insights que quieran reflejar, si nosotros vamos a fijar nuestras narices en algo ¡¡va a ser en el making of!! ¡Vaya pasada! Ahí os lo dejo.
Vía: Great-Ads