- Reducido espesor (3-15 mm).
- Ligereza (del orden de 2 kg/m2).
- Fácil manipulación e instalación.
- Aislamiento constante.
- Larga duración.
- Combinan buenas propiedades térmicas y acústicas.
Su suministro suele ser enforma de bobinas o rollos que pueden ser cortados fácilmente mediante herramienta cortante.
Desde el punto de vista del aislamiento acústico se emplea tanto en particiones verticales interiores como en la parte ciega de los cerramientos de fachada, aunque en este último caso su uso viene dado principalmente por sus excelentes propiedades térmicas.
En cerramientos de particiones interiores verticales su uso es especialmente recomendable cuando se requieren elevadas prestaciones de aislamiento acústico a ruido aéreo con un espesor reducido. En estos casos se puede emplear combinado tanto con placas de yeso laminado como con hojas de fábrica de ladrillo cerámico.
En cámaras de aire de cerramientos cerámicos de doble hoja se instala mediante rastreles a los que se fijan las láminas mediante grapas. En la siguiente figura se puede ver el sistema de fijación.
Ensayos realizados por los fabricantes de algunos de estos productos muestran que es posible obtener niveles de aislamiento superiores a los 55 dB mediante el empleo de forma combinada de placas de yeso laminado, aislantes reflectivos y lanas minerales con espesores totales de 11 cm.