Una frase para reflexionar el fin de semana.
En lo que más me deja pensando a mí es en la importancia de recordar siempre que el cambio, más allá del entorno, depende de nosotros mismos.
No nos quejemos del viento, ni esperemos a que cambie, vayamos ajustando las velas para llegar a nuestro destino (nuestros objetivos), más allá del viento y los factores externos.
¡Ánimo! y Buen fin de semana.