Al combate de la chicharra en iglesia

Descubrieron que pone sus huevos en los del insecto que se transformó en una plaga en 2012.Por Daiana Kaziura - Diario De CuyoAsí como la chicharra se transformó en una plaga que atormentó a los iglesianos en 2012, ahora detectaron una pequeña avispa que le da batalla al insecto. La avispa coloca sus huevos en el interior de los huevos de las chicharras, impidiendo su reproducción. Debido a eso, se decidió evitar la fumigación masiva que se implementó el año pasado y atacaba a todos los insectos a la vez, para dejar que el ciclo se controle naturalmente. Según Valeria Pantano, directora de Sanidad Vegetal de la provincia, como consecuencia “ha bajado considerablemente la presencia de las chicharritas y creemos que pronto se logrará el equilibrio”.
La invasión de las chicharras generó dolores de cabeza a los iglesianos hace 2 años, sobre todo a aquellos que se dedican a actividades turísticas. Es que, por las molestias que ocasionan, los insectos terminaron espantando a los visitantes. “No sabemos qué generó la plaga de chicharritas, que también se produjo en otras zonas del país como Río Negro o Tunuyán -en Mendoza-, donde hay gran cantidad de álamos, que junto a los sauces son los árboles en los que viven estos insectos. Lo que se cree es que influyeron factores climáticos”, explicó Pantano.
Con el fin de bajar la superpoblación, la medida que se tomó fue fumigar de forma masiva, lo que también afectó a otros insectos. Sin embargo, el año pasado, tras un análisis del estado de los huevos de las chicharras, se descubrió qué algo los estaba afectando. “Detectamos que en los huevos de las chicharritas había parasitoides. Es decir, se descubrió la presencia de insectos que necesitan los huevos de otras especies para que sus propios huevos se reproduzcan en su interior”, explicó Pantano. A finales de 2013, los especialistas lograron capturar uno de esos huevos y lo enviaron a Tucumán, para que los analizaran en la Planta Piloto de Procesos Industriales Microbiológicos (Proimi). Allí identificaron a la avispa de especie Gonatocerus Ateres, que al colocar sus huevos en el interior de los de las chicharras evitan que estás se reproduzcan.
“Creemos que esta avispa apareció justamente por la superpoblación de chicharritas. Es un insecto muy pequeño -de alrededor de 3 mm- que prácticamente no se ve y no genera molestias a las personas”, detalló Pantano. Por este motivo, las autoridades decidieron que este año no se fumigue todo el departamento, porque de ese modo matarían también a la avispa, y esperar que la población de insectos se equilibre de modo natural.
“Esta es la época del año en la que más se ven las chicharritas. Porque los árboles pierden sus hojas y ellas salen a buscar un espacio más cálido para vivir. Notamos que por la acción de la avispa la cantidad de chicharritas disminuyó considerablemente. No tenemos datos exactos pero, por ejemplo, antes en la ventana de una casa se podía encontrar 1.000, ahora sólo se ve unas 30”, dijo Pantano. Y agregó que “aconsejamos a la Municipalidad que sólo se fumigue en sitios particulares en los que los pobladores vean gran cantidad de insectos y resulten una molestia para ellos”.
En cuanto al tiempo que llevará que se logre este equilibrio, la especialista aseguró que “todo depende del clima, no se puede hacer una proyección, pero creemos que será muy pronto. Hay que aclarar que no se producirá una superpoblación de estas avispas, porque a medida que haya menor cantidad de huevos de chicharritas, ellas irán disminuyendo”.