Al final me tengo que reír

Después del revuelo que se montó la semana pasada porque un pediatra que llevaba 30 años trabajando, publicó un libro en el que decide pasarse las recomendaciones oficiales de la OMS y de la Asociación Española de Pediatría por el arco del triunfo han pasado muchas cosas.

Primero me indigné y publiqué un post aunque no pensaba hacerlo.

Después se lió la cosa en los comentarios de mi post porque parece que este pediatra no es el único que piensa esas lindezas.

Durante esa semana este hombre obtuvo lo que estaba buscando desde el principio: fama, reconocimiento y vender muchos libros.

De hecho, le entrevistaron en la radio, salió en todos los periódicos y hasta salió en la Televisión.

Ahí es donde se descubrió totalmente este hombre porque se dedicó a decir perlas como estas:

“En todos los hospitales están ingresando niños con desnutrición y deshidratación. Jamás hemos visto tantos niños con anemias ferropénicas, tantos estigmas raquíticos y tantos complejos de Edipo exacerbados” (Con respuesta del gerente del Departamento de Salud de Castellón que es donde trabaja “No nos consta el ingreso de niños raquíticos”)

“La lactancia materna a partir de un año ya no tiene función nutricional”

“La lactancia produce excitación sexual pero la mayoría de las madres mienten cuando se les pregunta”

“Otras lactivistas radicales plantean con toda naturalidad y crudeza la relación sexual madre-hijo. Piensa lo que puede suceder en aquellos casos en los cuales las propias madres se exictan sexualmente con la succión y se practica el colecho tan de moda hoy día. ¡Sin comentarios!”

“Es un libro que suscribirían los miles de pediatras experimentados que hay en cualquier país occidental” (sin embargo la Asociación Española de Pediatría afirma que este libro es una barbaridad)

Así no puedo tomarlo en serio, por más que quiera no puedo.

Debo tener un sentido del humor muy extraño pero es que cuantas más cosas leo que dice este hombre más gracia me hace, me parece que él solo se está desacreditando y que alguien debería hacerle entrar en razón, porque creo que ha montado un circo del que no sabe salir.

Porque resulta que no sólo es un experto pediatra que sabe más de lactancia materna que todos los organismos oficiales, es que además es psicólogo, psiquiatra, telépata y vidente.

Lo próximo que dirá es que va a poner unas velas negras a todas las madres que den el pecho más de 4 meses, ya lo verás.

Así que como homenaje le he preparado este vídeo y así todos nos echamos unas risas (lleva subtítulos, si no los ves debes pinchar en el cuadrado que está en la parte inferior derecha del vídeo):

Y aunque me ría de esto, por otro lado intento poner mi granito de arena para que impresentables como este no se carguen lactancias, porque mañana jueves 12 de febrero abrimos las inscripciones a la 3ª Promoción del Programa de Formación de Asesoras de Lactancia Materna EDULACTA que formará a las mejores asesoras con las que las madres puedan contar.

Hay que contrarrestar todas esas barbaridades