Noruega sufría este viernes 22 de julio el primer atentado masivo de su historia. Y por partida doble. El primer ataque fue la explosión de una bomba a las 15.20 h en el distrito gubernamental de Oslo que provocó la muerte de al menos siete personas y decenas de heridos. La 'ciudad de la paz', atacada. El segundo fue un tiroteo en una isla cercana a la capital noruega, Utøya, en el que fallecieron al menos 84 personas. En total, al menos 91 víctimas mortales.La Policía logró detener en Utøya a un hombre al que identificó como supuesto autor de la masacre, que iba vestido de policía cuando realizó el ataque contra un campamento juvenil que organizaba el partido laborista, del que es el primer ministro del país. Según ha confirmado el Gobierno, el arrestado es noruego, tiene 32 años y podría pertenecer a movimientos de extrema derecha. La Policía busca a otra persona que podría haber participado en el tiroteo junto al detenido.
El primer ministro, Jens Stoltenberg, resultó ileso en el atentado pues no se encontraba en su oficina en ese momento. Posteriormente, reunió a su gabinete de crisis para afrontar los hechos y ofreció una rueda de prensa ya este sábado para decir que Noruega vivía "la peor tragedia nacional desde la Segunda Guerra Mundial".