Quién esto escribe daba por perdida su participación en el Bafici de este año. Gracias a que a último momento le consiguieron comprar entradas para el día de cierre, tuvo la extraña suerte de ver una película de hace casi cuarenta años y seguidamente, en la misma sala, a la ganadora del Festival, cuyo estreno, después del premio, parece asegurado.
El Bafici sigue defendiendo la eliminación de fronteras entre la ficción y el documental. Su argumento principal son las películas ganadoras. Se nota esa continuidad en la elección de las seleccionadas, que juegan con esa frontera de realidad recreada y guiones reescritos en función de los hechos. En este caso se trata de una bella historia de despedida entre un padre y un hijo, a la vez viaje iniciático y búsqueda de sentido. La cámara se acerca a cada detalle, pero al mismo tiempo parece no alterar nada, respetando un fluir autóctono. Los personajes van construyendo un mundo mínimo aunque sustancioso y sensible.
En definitiva, una excelente película que bien merecido tiene este premio. Muy recomendable
Guión y dirección: Pedro González Rubio
Elenco: Jorge Machado, Natan Machad Palombini, Roberta Palombini, Néstor Marín “Matraca”